?Pristina.- El socio minoritario del gobierno de Kosovo abandonó hoy la coalición
presidida por Hashim Thaçi y sumió el país balcánico en su primera gran crisis
institucional desde que se independizó de Serbia, en febrero de 2008.Fue nada menos que el ex presidente de la flamante república, Fatmir Sejdiu,
que dirige la Liga Democrática de Kosovo (LKD), con 27 de los 120
parlamentarios, quien decidió salir del gabinete con un viceprimer ministro,
seis de 18 ministros y otros altos cargos.
La crisis comenzó hace tres semanas, cuando Sejdiu tuvo que dimitir de la
presidencia del país, después de que el Tribunal Constitucional decidiera que
había infringido la Carta Magna por haber mantenido simultáneamente la jefatura
del país y de la LDK.
A partir del lunes, 18 de octubre, todos los miembros de la LDK en el
Gobierno de la República de Kosovo, un viceprimer ministro, seis ministros y
varios viceprimeros ministros, abandonarán sus puestos en el Gobierno, dijo hoy
Sejdiu.
Su decisión fue divulgada un día después de que el presidente en funciones,
Jakup Krasniqui, anunciara la convocatoria de elecciones parlamentarias
anticipadas para el 13 de febrero de 2011, debido precisamente a la dimisión de
Sejdiu como presidente.
Al mismo tiempo, los actuales torbellinos políticos en Kosovo asestarán, con
toda seguridad, un duro golpe al de por sí complicado diálogo entre Pristina y
Belgrado, que debería empezar pronto, tras ser presionadas ambas partes por la
Unión Europea (UE) y EU.
Belgrado sigue sin reconocer la independencia de Kosovo, que hasta hace dos
años fue una provincia, primero de Yugoslavia y después de Serbia.
Los contactos entre los dos países vecinos deberán ser aplazados hasta
después de los comicios generales, que podrían adelantarse incluso a este
noviembre, si se precipitan los acontecimientos.
La LDK no precisó las razones de la salida del gabinete, pero las disensiones
con el partido del primer ministro, Hashim Thaçi, han sido muy frecuentes.
Esta semana, la estrategia de Thaçi de privatizar los servicios de correos y
telecomunicaciones fue rechazada en una votación en el Parlamento kosovar por
los diputados de la LDK, la afiliación más antigua de Kosovo, fundada por el
histórico líder Ibrahim Rugova, fallecido en enero de 2006, que fue sucedido por
Sejdiu.
Cuando dimitió Sejdiu quedó bien sentado que el país iría a unas elecciones
anticipadas, pero ahora que ha caído también la coalición gubernamental, la cita
con las urnas podría ser incluso en un plazo de 45 días.
Thaçi calificó hoy la decisión de la LDK de sorprendente y de mala noticia
para Kosovo y sus ciudadanos, así como de un mensaje negativo para los amigos
internacionales del país.
“Ahora tenemos una crisis institucional en el país. La decisión fue motivado
por los miopes intereses electorales de Fatmir Sejdiu”, dijo Enver Hoxhaj,
miembro del partido gobernante PDK, de Thaçi.
Los embajadores de la Unión Europea y de Estados Unidos, que tienen una gran
influencia en la conducta y las decisiones de los dirigentes kosovares y, de
hecho, están también pendientes de la evolución de la frágil democracia en el
país balcánico.
El embajador estadounidense en Pristina, Christopher Dell, se reunió con
Thaçi, sin que estuviera previsto el encuentro en la agenda.
La Oficina de Asuntos Civiles, con amplios poderes para nombrar cargos y
velar por la independencia de Kosovo, alentó hoy a sus líderes a actuar acorde
con la constitución y en interés del pueblo “ante la importante tarea que tiene
el país para que funcione como Estado en su camino hacía la UE”.
El gobierno de Kosovo se tambalea
La coalición que dirige el recién independizado país sufrió la pérdida del ex presidente, quien renunció junto a varios ministros por un escándalo al interior de su partido
Fuente: Internet