Ciudad de México.- El Departamento de Conservación de Nueva Zelanda, informó que 145 ballenas piloto han muerto, después de que el agua las arrojara a una playa del golfo de Mason, en la isla Stewart.
Las ballenas fueron encontradas el pasado sábado en una playa de difícil acceso, en una zona de dos kilómetros de extensión, por lo que cuando los empleados lograron llegar al lugar, la mitad de los animales ya habían muerto.
Imágenes de RT:
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“Lamentablemente, la posibilidad de mover a los otros calderones al agua fue extremadamente baja. La ubicación remota, la falta del personal en las cercanías y el estado de deterioro de las ballenas evidenciaron que la cosa más humana era practicarles la eutanasia” admitió Ren Leppens, quien forma parte de la entidad
