Bagdad.- El Estado Islámico de Irak, un conglomerado de grupos terroristas liderado por Al Qaeda, asumió hoy la autoría de la ola de atentados que causó ayer, domingo, la muerte de más de 90 personas y heridas a 400 en varios puntos de Irak.
En un comunicado difundido en una página utilizada habitualmente por los islamistas, Al Qaeda aseguró que los ataques son en venganza por la muerte de “almas puras” y las torturas a presos suníes en las cárceles iraquíes.
“En represalia por las campañas de tortura a las que se enfrentan los
rehenes suníes en las cárceles iraquíes, en venganza por las almas puras
que murieron a manos de los paganos, y para impedirles cometer más
crímenes, las fuerzas del Estado islámico llevaron a cabo una nueva ola
de ataques”, explicó el grupo.
Según la nota, los ataques tuvieron como objetivo “los puntos clave de
la seguridad y de las milicias y de los seguidores del gobierno
criminal”, como se refieren al Ejecutivo del chií Nuri al Maliki.
El Estado Islámico de Irak amenazó con nuevos ataques y dijo que esta ola de atentados es “un mensaje urgente al que le que van a seguir muchos más”.
Por su parte, el Ministerio del Interior iraquí acusó a Al Qaeda de
estar detrás de los ataques y señaló que estos solo logran que aumente
“el rechazo a someterse a la voluntad del terrorismo y sus planes
malvados” .
“La batalla contra el terrorismo va a seguir y nuestras fuerzas de
seguridad están cada vez más desarrolladas y van a intensificar sus
esfuerzos para cercar al terrorismo”, añadió la nota.
Los atentados de ayer, perpetrados con coches bomba y artefactos
explosivos, afectaron a la mayoría de las provincias iraquíes, en
especial a las ciudades de Al Emara (sur), Kirkuk (norte) y Bagdad.
El atentado más sangriento se produjo cerca de Al Emara, a 370
kilómetros al sur de Bagdad, donde quince personas fallecieron y
cincuenta sufrieron heridas por el estallido de dos coches bomba.
CHG