Estados Unidos.- Lo que inició como una dulce historia de amor terminó siendo todo un cuento de terror, pues una mujer de origen Nicaragüense fue asesinada y decapitada por su propio esposo en el Condado Waller, en Texas, Estados Unidos.
Angie Díaz, de 21 años de edad, se había casado con Jared James Dicus, un hombre estadounidense, apenas el pasado mes de octubre y vivían en una casa en el patio trasero de los padres de este último. Sin embargo, esto no fue suficiente para evitar el atroz crimen al interior de la propiedad.
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Según lo expuesto por la policía, los hechos ocurrieron alrededor de las 4 p.m. del miércoles 11 de enero, cuando la policía local fue alertada sobre una mujer asesinada. El alguacil del Condado Waller, Troy Guidry, señaló que la escena hallada por los elementos de seguridad fue absolutamente terrorífica:
Una parte del cuerpo de la mujer había sido desmembrado, la escena era espantosa. Todas las partes y piezas fueron recuperadas como evidencia. Se habían recibido otras llamadas de esta casa, pero nada comparado con este nivel de violencia.
El esposo, quien fue denunciado por su propio padre, permaneció en la escena y fue detenido justo después de confesar el crimen, aunque no se dieron a conocer los motivos.
La joven era mujer indocumentada y se había mudado al condado Waller recientemente. Su casa estaba cerca de una carnicería, lugar en donde trabajaba, ubicada al noroeste del área metropolitana de Houston. Según los videos de seguridad, el sospechoso fue captado entrando a la carnicería a comprar una cerveza el día del crimen.
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El brutal feminicidio de la mujer migrante ha conmocionado a toda la comunidad, por lo que se espera que muy pronto la investigación arroje resultados y revele cuál es la verdad de lo que llevó a que esta fuera asesinada tan solo tres meses después de su boda.
