EU.- Aunque fue uno de los hombres más ricos y poderosos, actualmente Joaquín “El Chapo” Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa, es un prisionero más en Estados Unidos, lo que lo deja vulnerable ante varios escenarios. Según la abogada del capo mexicano, Mariel Colón, este sabe bien que puede ser una víctima más de la pandemia de coronavirus y recientemente se ha mostrado interesado en que se le aplique la vacuna contra el COVID-19.
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En la cárcel de ADX en Florence, Colorado (EEUU), el Chapo vive aislado desde hace más de un año. Este centro penitenciario acoge a más de 400 reclusos entre los que se encuentran los criminales más peligrosos y violentos de Estados Unidos.
Según ‘Prison Policy Iniciative’, el encarcelamiento masivo estuvo relacionado con 566,804 casos adicionales de Covid-19 en Estados Unidos y señalan que la tasa de infección por COVID-19 en las prisiones es cuatro veces mayor que la de la población general de EU.
Por tal motivo, Guzmán Loera ha solicitado que los guardias que suelen resguardarlo en su celda de 7 por 12 pies, sean más cuidadosos y le entreguen artículos de limpieza, asimismo, preguntó cuándo sería su turno para la vacuna contra el COVID-19.
El Chapo es considerado parte de la población vulnerable en contraer el virus, por su edad y los padecimientos que sufre desde que se encuentra en prisión, sin embargo, las autoridades penitenciarias estadounidenses consideran que, tomando en cuenta que el capo se encuentra confinado en su celda 23 horas al día y tiene casi nulo contacto con otras personas, es demasiado bajo el riesgo de contagio.
A sus 63 años, el Chapo aún no está en la lista de personas que pueden recibir la vacuna contra el nuevo coronavirus. Guzmán desconoce cuándo será su turno “o si él tendrá acceso a eso”, escribió su abogada.
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