Ciudad de México.- En los últimos años, el número de mascotas en el país se ha incrementado considerablemente, aunque los lazos estrechos podrían derivar en hiperapego, que altera el equilibrio emocional del dueño y el animal, señaló Angelina Guerrero Luna, de la Facultad de Psicología (FP) de la UNAM. La investigadora considera que una de las desventajas de esta relación radica en el egoísmo humano, que piensa que los animales pueden suplantar su soledad y los tratan como si fueran personas, humanizándolos con tal de satisfacer sus carencias personales. Considera que tal comportamiento no contribuye en su cuidado, salud y ejercicio físico, ya que la relación desnaturaliza la vida de las mascotas, por un lado y da una existencia artificial y de encierro, por el otro. Dice que la desaparición de los límites interespecie y los derivados entre mascotas y amos, puede generar confusiones, estrés e inseguridad entre ambos. “Las respuestas del animal pueden ir desde ansiedad y desesperación, hasta temor y sensación de abandono; pasa por el olvido si es confinado en departamentos, zotehuelas, azoteas, cornisas, o deambula, como perros o gatos callejeros con efectos malos en la comunidad”, señala. Este comportamiento deriva en respuestas agresivas hacia los individuos, y coloca a los animales en riesgo de salud con epizootias (enfermedad contagiosa que ataca a un número inusual de animales). Además, cuando son abandonados a su suerte son sacrificados o mueren en accidentes de tránsito. El vínculo afectivo con mascotas María Montero y López Lena, también de la Facultad de Psicología, consideran que las mascotas constituyen en la interacción según la capacidad del sujeto. Ese vínculo afectivo puede ser tan saludable o no, como uno interpersonal. Si se establece apego no es sólo por la mascota, sino por las necesidades del sujeto. No obstante, si se vive en soledad, un animal no necesariamente eliminará esa carencia. Señalan que además, la soledad no necesariamente es una experiencia negativa, puede ser la ocasión para evidenciar un problema psicológico, o una oportunidad para trascender y lograr un grado de autoconocimiento. Más perros y gatos que niños menores de nueve años En México viven 23 millones de perros y gatos, población que supera a la de niños menores de nueve años que, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), es de 19.7 millones. La cifra es similar a la de habitantes en el estado de México (14.8 millones) y el Distrito Federal (8.8 millones), las entidades más pobladas del país (INEGI). Entonces, México ocupa el primer lugar en tenencia de esas mascotas en comparación con el resto de América Latina, y es que la cifra de 23 millones haría suponer que hay un can o felino en cada uno de los 24.4 millones de hogares que existen en el país. Lamentablemente, se estima que de los 18 millones de perros, sólo 30% está en un hogar, es decir 5.4 millones; el resto, son callejeros.
Hiperapego alteraría emociones en mascotas y dueños
Angelina Guerrero de la Facultad de Psicología de la UNAM considera que los humanos son egoístas al pensar que los animales pueden suplantar su soledad
Fuente: Internet