Sinaloa.- La derrota es amarga, sabe siempre mal aunque a veces se gane más perdiendo…sin embargo, para el boxeador inglés, Kristian Laight, la resignación de que no le levantaran la mano en cada pleito que hacia semana tras semana, fue algo que aceptó porque ganaba dinero, aunque rompió el récord de peleas perdidas que se tenga registro en la historia.
Y no fue un personaje del boxeo antiguo, sino todo lo contrario. Laight peleó como profesional desde el 2003 y se retiró en el 2018, con una impresionante marca de 279 derrotas en el pugilismo rentado.
Nacido en Nuneaton, en el condado de Warwickshire, Inglaterra, el 15 de julio de 1980, actualmente de 40 años de edad, Kristian Laight apenas ganó 12 combates, jamás pudo noquear a algún rival y empató en 9 ocasiones. Él fue detenido en apenas 5 pleitos.
Al retirarse del profesionalismo, en una entrevista con SKY Sports, Laight dijo que no podía perder por nocaut debido a que estaría inactivo unos 28 días por reglamento y no generaría ganancias, es entonces que siempre aguantaba todos los rounds hasta llegar a la decisión, aunque sabía que, por su poca habilidad y récord perdedor, no le iban a levantar el puño.
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“Solo tuve 10 peleas amateur y me sentí tentado por el dinero. Tuve algunas peleas en la carretera porque no podía vender boletos, y pronto me di cuenta de que si es una pelea cerrada, el árbitro probablemente no me la daría a mí”.
“Hacia el final, se convirtió en solo un trabajo. Me arrastraron al gimnasio. Tuve que salir a correr para perder peso porque era un trabajo y necesitaba el dinero”.
Simplemente comencé a tratar de superar las peleas, cubrirme y escuchar la campana final”, comentó. “Se convirtió en algo semanal”.
“Se volvió fácil. Nunca tuve una gran habilidad, pero descubrí que era duro. Podía jugar en las rondas. Con la experiencia aprendí lo que estaba haciendo”.
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Kristian Laight apodado Mr. Reliable (confiable) se fue y dejó una frase para el negocio del boxeo: “Lo usé y me usaron”, debido a que fue oponente de muchos púgiles en ascenso en Inglaterra, no ganaba peleas, pero generaba ingreso semanal para su familia.
Llegó a acumular 77 derrotas en fila, pero reconoce que nunca se molestó, puesto que podía cobrar unos mil euros por cada vez que subía al ring.
En total, hizo 300 peleas, con el afamado peor récord de la historia, 12 triunfos, 279 descalabros, solamente noqueado 5 veces y con 9 empates, sin haber noqueado nunca.
El inglés manifestó en aquella charla con SKY Sports, que ganó más peleas, pero por obvias razones, no le levantaban la mano a un púgil de su cartel.
“Lo extraño, pero más al dinero, fue un trabajo fantástico, el mejor trabajo que jamás tendré”, finalizó el mítico peleador.
Así la histórica pero poco prestigiada carrera profesional de Kristian Laight.
