Guasave, Sin.- Para Jesús Emmanuel Ávila, los Algodoneros de Guasave juegan un papel muy importante entre él y su papá Abelardo Ávila, quien en vida defendió la casaca blanquiazul en el Carranza Limón y 50 años después su primogénito, logró conseguir el guante de oro en la Liga Mexicana del Pacífico.
El tercera base de los Algodoneros, resaltó que tenía mucho tiempo buscando ese nombramiento y que fue gracias al trabajo y esfuerzo que pudo lograrlo este 2021.
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“La verdad lo busqué demasiado y bendito Dios que se me cumplió, seguir adelante, seguir demostrándolo día con día, me siento orgulloso conmigo mismo por el trabajo que siempre he llevado; mi padre ya no está conmigo, pero sé que está allá en el cielo aplaudiéndome este logro que hice y más que lo hice en su tierra (Guasave),” destacó Ávila.
Ávila Gámez se convirtió la mañana de este jueves en el primer elemento de los Algodoneros de Guasave en recibir el guante de oro con la nueva franquicia blanquiazul, tras firmar su regreso al gélido circuito en la temporada 2019-2020.
El oriundo del Ejido México, participó en 56 juegos en la pasada temporada con los blanquiazules, alcanzando un porcentaje defensivo de 0.964, con solo 5 errores en 139 oportunidades.
Por otra parte, el defensivo de la esquina caliente de los Algodoneros de Guasave, catalogó como una bomba el asistir a Barcelona y que será una nueva experiencia para él en su carrera como profesional.
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“Es una bomba, porque ir a jugar a Europa no cualquiera lo hace, gracias a Dios por esa oportunidad que se está dando, ir para allá, ir a demostrar que en México hay demasiado talento y que hay un gran nivel,” puntualizó el pelotero.
Jesús Emmanuel Ávila llegó a la organización de los Algodoneros con el draft de expansión celebrado en Monterrey en 2019, y rápidamente se afianzó en la esquina caliente de los blanquiazules, convirtiéndose en un referente de la afición algodonera.
