Sinaloa.- El estado de Sinaloa debe prepararse desde ya, para recibir los posibles efectos no de uno, sino de dos sistemas ciclónicos que en este puente patrio y durante la próxima semana, activarán condiciones inestables.
La primera alerta la levanta el ciclón “Lester”, activo como tal desde la madrugada de este viernes 16 de septiembre y que amenaza con tocar tierra el próximo domingo entre Guerrero y Michoacán, además no se descarta que eleve su intensidad a huracán.
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Su desplazamiento hacia el noroeste, y sus extensas bandas nubosas de más de 400 kilómetros, proyectarán nubosidad, humedad y lluvias hacia regiones de Colima y Nayarit, y eventualmente cuando interactúe con otro más, se extenderán sus efectos desde Colima y hasta Sinaloa.
Y es precisamente el que será primeramente la depresión tropical Catorce-E, y probablemente después el ciclón “Madeline” el que durante su desplazamiento el cual podría iniciar como tal entre sábado y lunes, dejará lluvias importantes específicamente en Sinaloa.
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De acuerdo al pronóstico extendido del Servicio Meteorológico Nacional, se proyectan lluvias de 75 y hasta de 150 milímetros durante domingo y lunes, que estarán desplazándose prácticamente por todo el territorio sinaloense desde el sur.
Se esperan intervalos de lluvias intensas, pero también, vientos arrachados de hasta 60 kilómetros por hora, así como oleaje elevado de uno a tres metros que estarán presenten en este puente patrio y todavía la semana entrante.
Tema destacado: El ciclón “Lester” está activo y ya se espera que toque tierra ¡prevenidos!
Recordemos que con “Kay” en anterior sistema que impactó en Baja California Sur, los efectos mayores para Sinaloa se dieron dos días después de que aquel estado sintió sus efectos, y acá los signos fueron oleaje muy elevado, nublados permanentes y lluvias dispersas, principalmente en el norte de la entidad.
Así que mientras estos dos sistemas interactúan y se desplazan por aguas del Pacífico o sobre tierra, Sinaloa debe estar atento ya que la capacidad de la tierra para absorber agua está limitada, y esto impulsará inundaciones, crecidas de arroyos, ríos y otros afluentes.
La vigilancia de las presas sigue constante, ya que algunas están al 100 por ciento de su capacidad y los escurrimientos siguen, y aunque controlados, con este nivel de lluvias que se espera, podrían afectar a zonas bajas ¡prevenidos!.