México.- “Pamela” ha pasado por diferentes fases desde su activación, y se quedó con la amenaza de dos que quedó finalmente descartada; pero se reorganizará y retomará el nivel uno con fuerza capaz de dañar.
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Un huracán uno se asume de esta potencia cuando los vientos llegan entre 118 y 153 Kilómetros por hora, capaz de ocasionar daños mínimos, principalmente a árboles, vegetación y casas móviles o remolques que no estén bien sujetos.
Además, tiene fuerza para destruir de manera total o parcial del tendido eléctrico o letreros mal instalados, así como general marejadas de 1.32 a 1,65 metros sobre lo normal y daños menores a los muelles y atraques.
Solamente la cercanía de sus bandas logró inundar zonas de Sinaloa, específicamente la ciudad de Los Mochis, que acumuló más de 100 milímetros y anegó calles, caminos rurales, inundó viviendas y dejó decenas de vehículos varados.
Se espera que “Pamela” toque tierra en Sinaloa entre las 6:00 y 9:00 de la mañana y lo haga con vientos sostenidos de 130 a 155 kilómetros por hora entre La Cruz de Elota y San Ignacio en la zona sur de Sinaloa.
Sus remanentes chocarán con el frente frío cuatro y ya sobre Durango, retomará la descarga de abundantes lluvias que podrían ir de los 150 a 200 milímetros; posteriormente se enfilará a Tamaulipas y Estados Unidos.
