Guasave, Sinaloa. Las lluvias provocadas por la tormenta tropical Ileana han brindado una oportunidad inesperada para los agricultores del módulo Guasave, quienes ahora ven la posibilidad de aprovechar la humedad generada en los campos para sembrar maíz y frijol, dos cultivos clave en la región.
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Modesto López Leal, presidente del módulo Guasave, explicó que a pesar de los posibles efectos adversos que pueden ocasionar las lluvias intensas, en esta ocasión la tormenta ha dejado más beneficios que perjuicios.
“Toda esta agua está regando el valle del río Sinaloa, desde aquí hasta El Alamito. Las tierras que están recibiendo esta agua podrán conservar la humedad necesaria para sembrar maíz. Si las lluvias continúan, pues la humedad se puede seguir conservando y con eso hay posibilidades de formar el cultivo de maíz allá a finales de octubre o principios de noviembre”, afirmó.
La principal ventaja que dejaron las lluvias es la humedad en los suelos, lo que abre una ventana para que los agricultores comiencen a planificar el ciclo de siembra de maíz, previsto para finales de octubre o principios de noviembre. López Leal subrayó la importancia de que las lluvias continúen, al menos una cada diez días, para mantener las condiciones óptimas.
Aunque no todas las tierras estarán en condiciones para sembrar, aquellos terrenos que logren conservar la humedad podrán iniciar el ciclo con dos riegos de auxilio. Cada productor deberá tomar la decisión de sembrar dependiendo de cómo haya afectado la tormenta a sus parcelas.
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Además del maíz, otro cultivo que podría beneficiarse de las actuales condiciones es el frijol, un producto que se siembra en menor escala en la región. Con la humedad actual, los agricultores que siembran frijol están en un momento ideal para aprovecharla. No obstante, apenas unas mil 500 hectáreas se destinan a este cultivo, mientras que los cultivos de hortalizas abarcan alrededor de 2 mil 500 hectáreas.