Mazatlán, Sinaloa.- La actividad ganadera de Mazatlán visto una repercusión negativa en los últimos diez años, lo que se traduce en una reducción de los hatos hasta de un cuarenta por ciento, situación que se ha visto más agudizada por la sequía que enfrenta la entidad en este año, expuso Sergio René Lizárraga Garzón.
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El presidente de la Asociación Ganadera Local General en Mazatlán mencionó que actualmente están batallando con la alimentación de los animales, con la adquisición de pacas traída de Culiacán, lo que genera un gasto extra para los productores, debido a que no hay alimentación en los campos para los animales.
“Pues estamos batallando mucho ya ves que la sequía nos ha golpeado mucho, ahorita lo que es esta región y ahí estamos batallando, estamos ahí a cómo podemos está la pastura, ya vesque está muy carísimo todo, pero estamos trayendo pacas de Culiacán, hasta eso por muy caras y ya ve que no nos ha llovido”, dijo.
Explicó que la producción de ganado se ha reducido porque muchos ganaderos están vendiendo los animales, al no contar con las condiciones económicas para sostenerlos, ya que además, el precio por kilogramo de becerro se ha reducido al menos cinco pesos, con lo que la pérdida a la hora de la comercialización repercute en el bolsillo de los ganaderos.
Lizárraga Garzón indicó que no importa que el precio del ganado haya bajado a los cuarenta y seis pesos, se tiene que vender para sostener la actividad, cuando en otras regiones el precio se encuentra por encima de los noventa pesos.
