Londres.- Amy Winehouse tuvo una
carrera corta, tan corta que ni siquera parecía ser suficiente para esa
“vida después de la muerte” que la industria discográfica otorga a sus
estrellas, desenterrando cada par de años grabaciones inéditas y
preparando álbumes en tributo a los fallecidos. Además, en los últimos
años, la cantante empleó tanta fuerza en luchar contra sus propios
demonios que apenas apareció por los estudios de grabación.
Winehouse no consiguió por ello grabar un tercer disco. Después de su
muerte, su discográfica armó a duras penas un álbum con canciones
inéditas de la cantante, y parecía que eso iba a ser todo. Pero por
suerte para los fans de Amy Winehouse, está la BBC. La radiotelevisión
británica se encontraba entre los apoyos más fieles de la polémica
artista y grabó buen número de sus actuaciones, tantas, que dan para
tres DVDs y un CD en directo.
La BBC devuelve con ello algo de dignidad a Winehouse, quien murió en
julio de 2011 a los 27 años por una intoxicación de alcohol. Al final de
su vida, el público sólo sabía de la artista a través de las páginas de
la prensa sensacionalista, llenas de fotografías tristes de paparazzi.
Todo un naufragio. Las grabaciones en directo de Winehouse de los años
2004 a 2007 traen ahora de vuelta a la Amy Winehouse que estaba cayendo
en el olvido: Un talento natural con una gran voz y una impresionante
presencia en el escenario.
Entre las secuencias más destacadas de “Amy Winehouse At The BBC”,
además de su conocido concierto en el Porchester Hall de Londres de la
primavera de 2007, se encuentra la grabación de un concierto que ofreció
pocos meses antes en una pequeña iglesia en Irlanda, acompañada tan
solo de un bajo y una guitarra.
El pequeño marco, la reducida distancia con los apenas 80 oyentes,
confirieron al concierto una atmósfera mágica, que se puede percibir
incluso en DVD. La calidad de los ingenieros de sonido de la BBC nunca
traiciona.
En la entrevista que ofreció por aquel entonces con motivo del
concierto, Winehouse no se muestra como en otras ocasiones como una diva
arrogante, sino como una fanática posesa del jazz, por ejemplo cuando
recuerda la primera vez que escuchó a Ray Charles o a Thelonious Monk.
Uno de sus músico asegura que podría cantar todas las noches la misma
canción, siempre de manera diferente.
Las grabaciones en directo lo demuestran, y son un recordatorio de la
pérdida tan grande que supuso su temprana muerte para a la escena
musical actual.NE
