?Sé que no se lo llevaron de vacaciones?

Culiacán, Sin.- Sentada frente a los micrófonos de los reporteros, doña María Isabel cuenta lo difícil que ha sido su vida desde la desaparición de su hijo, el policía municipal Yosimar Reyes Cruz, el 26 de enero del año pasado. Han sido 365 días de rascar la tierra con palas, picos y sus propias manos para ver si su hijo está ahí, en una de las tantas fosas clandestinas que hay en Sinaloa.?Un año sin mi hijo es la muerte misma, morir por dentro, prometí no llorar, le juré a él que no iba a llorar más porque no sé si esté vivo, no sé si esté muerto, no sé dónde está?, relata.Con el paso de los días sabe que se esfuman las posibilidades de encontrar a su hijo con vida, pero es terca y se aferra a encontrarlo de alguna u otra manera para darle paz a su alma. ?Espero un día poder abrazarlo, encontrarlo como Dios quiera, ya no pido mucho porque sé también que no se lo llevaron de vacaciones, es muy difícil, sólo queremos encontrarlos para darle una sepultura digna, si es que ya está muerto, y si está vivo que me lo regresen?, comentó frente al retrato de su hijo. Tras el ?levantón?, una de las recámaras de su casa se convirtió en la oficina del Colectivo Sabuesos Guerreras, grupo de búsqueda que formó con otras siete mujeres que también buscan a sus desaparecidos y que ahora ya suman más de 40 integrantes. En los cristales de las ventanas de su casa no hay cortinas, los rayos del sol son detenidos por las fotografías de los desaparecidos con la leyenda de SE BUSCA; y en el árbol de afuera cuelgan listones de colores con los nombres de cada uno.Reprochó al fiscal General del Estado, Juan José Ríos Estavillo, que si fuera un hijo suyo también quisiera resultados rápido y en menos de una semana ya lo hubieran encontrado. ?Mi carpeta está vacía y el señor (Fiscal) todavía dice que nosotros decimos que queremos resultados rápido, si fuera un hijo de él yo creo que lo encontrarían en menos de una semana, es más, lo encontraría en horas?, reclamó. El ?levantón?Yosimar había desmontado su turno por la tarde el pasado 26 de enero, hoy hace un año. Iba llegando a su casa, en la colonia Infonavit Humaya para descansar cuando un grupo armado irrumpió en su vivienda y se lo llevó por la fuerza frente a sus hermanos. Ese día su madre María Isabel, quien vivía fuera de Sinaloa, recibió una llamada que nunca olvidará: ?Mamá, se llevaron a Yosimar?. No la pensó dos veces y sin comprender lo que ocurría esa misma noche salió con rumbo a Culiacán. Desde entonces su vida cambió. Con la secundaria trunca nunca pensó estudiar una carrera, pero por necesidad ha tomado varios cursos y capacitaciones de forense y de conocimientos del cuerpo humano para saber si son personas o animales los restos óseos que hallan en las fosas.¿Y si fuera su hijo?ARG