?La Niña?, no se quiere ir

Sinaloa.- Durante el mes de noviembre del 2010, la continuación de La Niña se reflejó en las temperaturas de la superficie del mar por debajo de lo normal a través del Océano Pacífico ecuatorial.Por segundo mes consecutivo, solo pocos cambios fueron evidentes en los índices de La Niña, con un valor entre -1.3°C y -1.7°C a finales del mes.El contenido calórico de la subsuperficie del Océano (temperatura promedio en los 300 metros superiores), también permaneció bien por debajo del promedio en asociación con una termoclinal más superficial.La convección permaneció en aumento sobre Indonesia y suprimida sobre el oeste y centro del Pacífico ecuatorial. Continuaron aumentando los vientos alisios del este en los niveles bajos y las anomalías en los vientos del oeste en los niveles altos sobre el Pacífico ecuatorial.Colectivamente, estas anomalías oceánicas y atmosféricas reflejan condiciones de La Niña de moderadas a fuertes.Consistente con casi todos los modelos de los pronósticos, se espera que La Niña llegue a su punto máximo durante el periodo de noviembre a enero, y continúe hasta la primavera del 2011. Después de eso, el futuro de La Niña tiene mucha incertidumbre. La gran mayoría de los modelos, al igual que los promedios dinámicos y estadísticos indican un regreso a condiciones neutrales durante la primavera y temprano en el verano del Hemisferio Norte. Sin embargo, el resto de los modelos incluyendo el modelo del Sistema de Pronóstico Climático de la NCEP, sugieren que La Niña podría persistir hasta el verano. Siendo este evento de La Niña de moderado a fuerte, se han estado cumpliendo todos sus efectos usuales como son, la supresión de la temporada de ciclones tropicales, la disminución de la precipitación durante la estación de otoño y el acondicionamiento climático para que se registren temperaturas mínimas más bajas. Dentro de estos efectos normales resta por observarse precipitación por debajo de lo normal o escasa durante la próxima estación invernal y durante la primavera de 2011, y temperaturas mínimas más bajas que en los últimos 10 años.De prolongarse, La Niña hasta la estación de verano de 2011, podríamos tener en nuestra región un efecto poco usual de precipitación por debajo de lo normal, con consecuencias adversas para el almacenamiento de las presas, ganadería y agricultura de temporal.