?Hippocrates? exhibe realidad sobre hospitales públicos en Francia

Gijón.- Con una crítica a la realidad de los
hospitales públicos en Francia a causa de la crisis económica, el
cineasta Thomas Lilti presentó hoy en Gijón su filme ?Hippocrates?, con
el que compite en el Festival Internacional de Cine de Gijón. En
el Centro Cultural Antiguo Instituto, el cineasta señaló que también
quiso alejarse del imaginario colectivo que hay a partir de las series
estadunidenses sobre hospitales, como ?House?, ?Anatomía de Grey? u
otras. Lilti, quien estudió medicina por tradición familiar pero,
tras diez años en esta profesión surgió su pasión por el cine, ?conozco
bien los hospitales desde dentro y quería contar la situación de los
hospitales públicos en Francia?. ?Supongo que al igual que
España, los hospitales viven una situación particular por dificultades
que compartimos a nivel europeo a partir de la crisis económica, pero
quería contar una historia política y también graciosa?, añadió.
Expuso que lo hizo a través del personaje de Benjamín, quien acaba de
terminar medicina y aunque la película es una ficción ?es bastante
similar a la historia que yo pase?. ?Planee el filme alejándome
de series que expresan una realidad deformada de lo que pasa en un
hospital público, pero con humanidad y mucho respeto?, aseguró.
Afirmó que la recepción de su película ha sido positiva, no sólo por
parte de médicos sino del personal auxiliar, de los enfermeros.
En la película, Benjamin, interpretado por Vincent Lacoste hace honor a
su nombre: es el más joven entre los médicos de un hospital parisino. Su
primera experiencia como interno le lleva al centro clínico dirigido
por su padre, el doctor Barois (Jacques Gamblin). Ahí coincide
con Abdel (Reda Kateb) un facultativo argelino más experimentado que él,
en trance de superar las pruebas que le permitan trabajar en Francia.
Para Benjamin nada sale según lo esperado. La teoría dista mucho de la
complicada práctica diaria. El día a día le lleva a dudar de sus
capacidades, de sí mismo; sobre todo ante el ejemplo de Abdel, sumamente
solvente, casi un sacerdote de la medicina. El cineasta enfatizó
la importancia de los médicos extranjeros en los hospitales públicos de
Francia, los cuales constituyen el 30 por ciento de los facultativos,
pero lamentablemente no son bien vistos ni reconocidos. En la
película se dan situaciones cómicas en las que corren vecinas en los
momentos graves y emotivos, vividos por unos profesionales abnegados que
cada día deben hacer frente a todas las miserias humanas, en lucha
contra la crisis de los hospitales públicos desde la introducción del
concepto de ?rentabilidad? dentro del sistema de la salud.TJ