Bogotá. – La Procuraduría General de
Colombia ratificó hoy un fallo anunciado hace algunos meses mediante el
cual destituyó a nueve militares por un caso de torturas y vejámenes
sexuales contra soldados durante un entrenamiento.
Según la Procuraduría, encargada de sancionar disciplinariamente a los
funcionarios públicos, las sanciones contra siete cabos, un subteniente y
un soldado incluyen la destitución y la inhabilidad para ejercer cargos
públicos hasta por 20 años.
Los militares apelaron la decisión, pero el Ministerio Público se
pronunció en segunda instancia con una ratificación de las sanciones.
En mayo pasado, tres subtenientes fueron condenados a penas individuales
de 20 años de prisión en el marco de un proceso penal por el mismo
caso, mientras que 13 suboficiales fueron condenados en 2008 a penas de
entre 15 y 16 años.
El hecho ocurrió en 2006 en una base militar del municipio de Honda, en
el departamento de Tolima (centro-oeste), y produjo un escándalo de tal
magnitud que derivó en la salida del entonces comandante del Ejército,
general Reinaldo Castellanos.
La revista Semana denunció entonces que 21 soldados que
cumplían el servicio militar obligatorio fueron torturados durante un
entrenamiento para luchar contra la guerrilla en el Batallón Las
Piedras.
Según la Procuraduría, uno de los entrenamientos consistía en pasar
cerca de un supuesto “retén” sin ser detectados, pero tres soldados no
superaron la prueba, por lo que fueron “secuestrados” por militares que
hacían el papel de guerrilleros.
Los soldados fueron vendados y atados de manos, tras lo cual tuvieron
que someterse a interrogatorios en los cuales sufrieron golpes de
diversa índole.
“Primero con puños y patadas, después con medias (calcetines) llenas de
arena y planazos (golpes) de machete. Más adelante, los quemaron en
varias partes del cuerpo con una vara y les pusieron hormigas en las
orejas. La tortura continuó en un pozo en donde les sumergieron la
cabeza casi hasta ahogarlos”, afirmó la Procuraduría en el fallo de
primera instancia contra los militares sancionados.
Los soldados fueron sumergidos en charcos de barro con estiércol, por lo
que varios sufrieron síntomas de asfixia, de acuerdo con la denuncia.
El organismo de control disciplinario señaló además que los tres
soldados fueron desnudados y obligados a tocar con los rostros los
genitales de varios militares.IN
