Washington, EU.- Un
meteorito marciano de dos mil 100 millones de años descubierto recientemente en
África del norte
difiere de todos los encontrados hasta ahora por su riqueza en agua y su
similitud con rocas analizadas por las sondas de la NASA en Marte, según
revela un estudio publicado este jueves.
“La roca basáltica -de origen volcánico- contenida en este
meteorito es similar a la composición de la corteza marciana o de la
parte superior del manto de Marte”, explica Carl Agee, de la
Universidad de Nuevo México (sudoeste de Estados Unidos), uno de los principales
coautores de esta investigación aparecida en la revista científica
Science del 4 de enero.
“Nuestros análisis de los isótopos del oxígeno muestran que este
meteorito, denominado NWA (Noroeste de África) 7034, es diferente a todos
los demás puesto que su formación
química corresponde a la formación del sol de Marte y a las interacciones
con la atmósfera del planeta rojo”, añade.
Según este científico, la abundancia de moléculas de agua en este
meteorito (alrededor de 6000 partes por millón o diez veces más que en
otros meteoritos marcianos conocidos) hace pensar que se encontraba en la
superficie de Marte hace 2.100 millones de años.
El agua podía provenir de una fuente volcánica de un acuífero cercano a
la superficie, lo que hace pensar en una actividad acuosa persistió en
la superficie marciana durante el comienzo de la era Siderikiana
(amazoniana).
“Nuestros análisis de carbono muestran igualmente que el meteorito
sufrió una segunda transformación en la superficie de Marte que explica
la presencia de macro-moléculas de carbono orgánico”, reveló Andrew
Steele, de la Institución Carnegie y uno de los coautores del
estudio.
Para este científico “se trata del meteorito marciano más rico
geoquímicamente jamás encontrando y los análisis que se han realizado van
a revelar probablemente otras sorpresas”.
En total, se han encontrado hasta la fecha un centenar de meteoritos de
origen marciano.
Hizo falta espera a los años 80 para que la ciencia pudiera determinar el
origen de estos meteoritos a partir de un estudio de gas atmosférico
atrapado en el interior de las rocas.
Curiosity, la sonda más sofisticada jamás enviada a otro planeta por la
NASA, se encuentra desde comienzo de agosto en el cráter de Gale, en el
ecuador marciano, para determinar si el ‘planeta rojo’ fue propicio en el
pasado a la vida microbiana.
Los meteoritos de origen marciano o lunar son raros. La mayoría provienen
del cinturón de asteroides, una región del sistema solar situado entre Marte
y Júpiter.
En 2012 se registraron más de 42.000 meteoritos, un número que aumenta en
alrededor de 1.500 cada año, según datos de la Meteoritical Society. IN