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Culiacán, Sinaloa.- A Brenda Beatriz, Dios le dio una segunda oportunidad de vida, al recibir sólo algunos golpes leves en su cuerpo, luego de que una pesada pipa cargada con diésel se metió a su casa, el día miércoles en la sindicatura de Eldorado.
Esta misma bendición la recibieron sus dos hijos: Sebastián de 10 años y Emma, de dos meses de nacida, ya que minutos antes del accidente, ambos se habían ido a la vivienda de su abuela, ubicada a unos metros de donde ocurrió el accidente, mientras que el papá estaba en el trabajo.
Gabriela Mireles, hermana, de Brenda, narró que el destino ya lo tiene marcado cada persona, ya que alguna señal divina hizo que el niño no estuviera en su computadora recibiendo clases en línea, y que la bebé se desprendiera de su madre, lo cual no es muy común que ocurra con tan pocos días de vida.
Línea Directa estuvo en el lugar de los hechos, donde el conductor de una pipa en la que transportaba combustible, se introdujo a un domicilio que se encuentra junto a la carretera que comunica de Culiacán hacia la sindicatura de Eldorado, en la comunidad de Las Piedritas, la tarde de este miércoles.
“Esta chiquita apenas tiene dos meses, y ella no la presta, pero como andaba llorosita se la trajo y aquí la dejó con su mamá, el otro es un niño de 10 años y aquí estaba con su abuela jugando con otros niños”, expresó.
Todavía incrédula por lo ocurrido, Gabriela da gracias a Dios que Brenda haya salvado su vida, ya que sólo tiene un golpe en un hombro y una molestia en sus piernas, que, de acuerdo con el parte médico de una clínica particular en Culiacán, en breve ya estará de regreso en casa de sus familiares.
“Ya está bien, no puede mover las piernas, pero no las tiene fracturadas, es sólo por el golpe, y creo que tiene una abertura aquí en el hombro, pero no es nada grave, primeramente Dios, hoy la iban a dar de alta, le hicieron estudios de la columna y todo salió bien”, expuso.
Gabriela manifestó que después de que fue retirado el camión cisterna por los equipos de rescate conformados por Cruz Roja, Bomberos y Protección Civil, acudió personal de una compañía de seguros para valorar los daños de la vivienda, que a simple vista se observa que tendrá que ser derrumbada para edificar una nueva y reponer los muebles.
“Todo se les dañó, su estufa, su comedor, aquí la computadora del niño, su televisión del niño, aquí es el cuarto del niño, la salita, la cocina y allá el cuarto de ella y su esposo, pero no le pasó nada”, comentó.
La vecina del ejido Las Piedritas, aprovechó para pedir al gobernador Rubén Rocha Moya y al alcalde Jesús Estrada Ferreiro, que se instalen más señalamientos viales, se repongan los que han sido destruidos, se pinten las líneas que dividen los carriles, asimismo los topes, para que sean visibles para el conductor, y con ello evitar accidentes que puedan terminar en tragedia.
Es importarte señalar que la versión por parte de las autoridades, indica que el conductor de la pipa en la que transportaba combustible, se dirigía de norte a sur sobre la carretera Culiacán-Eldorado, y al llegar a unos topes reductores de velocidad, chocó por alcance una camioneta Toyota Tacoma, color ladrillo, y también una camioneta Dodge negra.
Después del impacto con la segunda unidad motriz, perdió el control del volante y se introdujo al domicilio en el que se encontraba la joven Brenda Beatriz, y tras el choque ambos quedaron lesionados.
El conductor fue identificado como Alberto, de 52 años, y después del accidente, acudieron Bomberos de Culiacán, elementos de Protección Civil municipal, y socorristas de Cruz Roja, para auxiliar a las personas y evitar un incendio por el derrame de combustible.
