Una visita a las embajadoras del mar

Mazatlán, Sin.- Consideradas hasta en
mitologías como las ?Embajadoras del Mar?, cada año en época invernal y de
manera especial en enero y febrero, las ballenas jorobadas visitan la bahía de
Mazatlán para aparearse.
Siendo
la única agencia ecoturística autorizada en el puerto para realizar recorridos
de avistamiento de estos mamíferos, el equipo de Onca Exploraciones lleva nueve
años dedicado al estudio de la fauna marina, ofreciendo a chicos y grandes un
sinfín de tours, en kayak, snorkel, observación de aves, siendo el de las
ballenas uno de los más gustados.
Ya
sea a bordo de la embarcación Isla Clarión, o de las lanchas Onca 1 y 2, el
viaje con promedio de cuatro horas de duración, mismo que comanda el
oceanógrafo Óscar Ricardo GuzónZatarain, promete a los pasajeros desde el
inicio, un espectáculo sin precedentes, siendo el misterio el factor más
emocionante en toda la travesía mar adentro.
?Hay
que esperar mucho tiempo. Los minutos cuando estás viendo ballenas se vuelven
bien largos. Nunca sabes qué vas a encontrar?.
?Ahí
están Saúl. Wao, wao, wao, ehhhhh (sonido de delfines) qué impresión?. 
La
tarde de este jueves, Línea Directa tuvo la oportunidad de vivir la experiencia
junto al personal de la Secretaría de Turismo con la intención de promover la
atracción turística entre locales y visitantes del destino, así como anunciar
el arranque de un programa de coparticipación entre Onca y Sectur, con el cual
serán capacitados operadores turísticos en el tema de conservación de fauna
marina.
Bastó
con alejarse unas 20 millas de la costa, alrededor de una hora y media, para
que el brinqueteo de un par de delfines despertara la emoción entre los
tripulantes del Onca 2; unos minutos más tarde, en el horizonte se asomó la
cola de una ballena obscura que dejó sin aliento a más de uno.
-¿Tú
ya las habías visto?
?Nunca,
estoy impresionada. Las había visto en documentales de Baja California Sur y
siempre he pensado que era una experiencia impresionante?.
?Nuestra
misión como empresa es conectar al público con la vida silvestre, con la
conservación y con su apreciación?.
?Es
toda una experiencia, desde que sales hasta el final?.
Al
finalizar el paseo, ya de regreso al embarcadero de la Marina Mazatlán, una
sonrisa demuestra que cualquier mareo o cansancio en el transcurso valió la
pena tan solo por haber tenido un acercamiento directo con el mundo marino. Ver el video aquí IN