Mazatlán, Sin.- Los alimentos orgánicos son una opción con excelentes beneficios para la salud de las personas, ya que no contienen las impurezas de pesticidas y químicos añadidos, por lo que cultivar productos orgánicos es optar por el bien común y da un valor agregado al producto.
Así lo explicó José Alberto Domínguez Luna, ingeniero agrónomo con experiencia en asesoría nacional e internacional, quien dijo que el manejo y cultivo orgánico de frutas, verduras y hortalizas de distintas clases permite obtener productos sin impurezas que pueden ser dañinas para la salud de los consumidores.
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José Alberto Domínguez Luna, ingeniero agrónomo con experiencia en asesoría nacional e internacional
Enfatizó que los alimentos de origen vegetal con un tratamiento orgánico es la mejor opción para la alimentación y bienestar de las personas.
“Los tratamientos orgánicos son mucho muy diferentes, porque no puedes aplicar un pesticida. No puedes aplicar un producto que lleve residuos. Todo debe ser residuo cero para lo orgánico y tienes que saber qué productos exactamente manejar para tener un buen control. Para el consumo humano, la fruta orgánica es lo mejor que puede haber”.
El experto en nutrición y cuidado de plantas refirió que todo producto que se cultiva y comercializa como orgánico tiene otro precio, así como un “valor agregado”. También hizo mención de que, en América del norte y Europa, en donde los países tienen una economía estable y mayor avance tecnológico, se consume principalmente producto orgánico, con el fin de aumentar la calidad de vida de sus ciudadanos.
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José Alberto Domínguez Luna, ingeniero agrónomo con experiencia en asesoría nacional e internacional
José Alberto Domínguez dijo que el único “pero” de la producción orgánica es la certificación y los permisos para cultivar y exportar de esa forma, ya que se requiere de tierras desinfectadas, libres de pesticidas, para así obtener un registro como agricultor orgánico, lo cual comentó, es un proceso que requiere de un lapso de alrededor de 5 a 6 años aproximadamente, para obtener una acreditación de agricultor y productor de alimentos orgánicos, lo que le permite actualmente sembrar y cosechar tomate, cebolla, calabaza, tomatillo, entre otras legumbres más.
