?Tenerla en los brazos con vida y que de repente ¡falleció!?

Guasave, Sin.- ?Tener
a una persona en los brazos con vida y que de repente digan que falleció es una
experiencia que marca y sin duda es la frustración más grande que a un bombero
le pueda ocurrir.
Don Francisco, con 18 años al servicio del
cuerpo de Bomberos en Guasave, ha sido protagonista y héroe anónimo de sucesos
como el incendio del Mercado Municipal en el 2007 y la explosión de las pipas
en la carretera Internacional en el 2008, así como la fuga de amoniaco de
nodrizas y múltiples incendios.
Y aunque nunca ha recibido un ?gracias? como
pago a sus esfuerzos, no es eso para él lo más frustrante de su oficio.
?La verdad no pensamos en lo que nos pueda
pasar a nosotros, sino en sacar a la persona?.
??cuando pasa es cuando me llega el miedo, me
llega el temor. Lo que me marca así es cuando esa persona que nosotros salvamos
se nos muere; tenerla en los brazos con vida y que de repente nos dicen que
falleció?, narra.
Sabe que hace mucho tiempo el oficio de bombero
dejó de ser para la sociedad un orgullo, pero aún así él se siente feliz de
portar su uniforme, aun cuando no recibía pago por ello.
Incluso, ha tenido que lidiar con aquellos que
no comprenden su sacrificio, familiares que le reclaman el amor a su familia al
tener que dejarla para ir al encuentro de los que más lo necesitan.
Este jueves se celebró en Guasave el Día del
Bombero, donde se les reconoció el arrojo para servir a la sociedad en
situaciones de dificultad con un alto sentido humano que en la mayoría de las
ocasiones pasa desapercibido para la ciudadanía.YRM