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Mazatlán, Sinaloa.- Entre vivas y porras de apoyo, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador arribó a Siqueros para supervisar los avances de la derivadora donde iniciaron los trabajos de construcción del sistema hidráulico con lo cual se pretende incorporar 22 mil nuevas hectáreas agrícolas al sistema de riego, obra complementaria de la presa Picachos.
Posteriormente se trasladó vía terrestre hasta la presa Santa María, ubicada en la sierra de Rosario para dar arrancar con la construcción de la cortina y verificar los avances del nuevo pueblo.
El domingo, a muy temprano, el ejecutivo federal inició su gira de trabajo por la zona sur de Sinaloa y allá, en el pueblo de Siqueros, lo esperaba un nutrido grupo de simpatizantes, vistiendo playares y gorras color blanco con la leyenda “Yo voto #QuesigaAMLO” e incluso, hubo quien llevaba en sus manos un mono de peluche que representaba la imagen de Andrés Manuel, el cual es utilizado por su propietaria como compañía para dormir durante las noches.
“¡Es un honor estar con Obrador!, ¡Es un honor estar con Obrador!”
“¡Qué sí, que sí, que siga Andrés Manuel!, “¡Qué sí, que sí, que siga Andrés Manuel!”
“¡AMLO, amigo Sinaloa está contigo!”
“AMLO, fírmelo… ¡Ándele!, le quito la gorra y fírmelo porque es mi almohada el oso de peluche”, manifestaron.
El presidente de la República, en su andar por Siqueros, al principio no se detuvo. Pero, al salir del recorrido, se bajó de su unidad para saludar a los simpatizantes y a los pobladores de la comunidad; ahí, a la prensa solo les dijo; “No puedo hablar, hay veda electoral” y se retiró hacía la presa Santa María.
Allá, AMLO fue un poco más abierto en la cuestión de preguntas y respuestas de los medios de comunicación. Incluso, frente a los pobladores aseguró que el nuevo pueblo y la presa van a quedar concluidas en su totalidad para el otro año y no solo eso, también se pavimentará todo el camino que conduce hacía esa área.
“Va bien, lo del sistema de riego va muy bien y vamos a terminar en tiempo, y no hay ningún obstáculo y ahora vengo a la presa Santa María, que también la vamos a dejar terminada con el distrito de riesgo. Pero ya no puedo hablar más”, señaló.
El ejecutivo federal, en el nuevo pueblo Santa María, le fue entregado el “bastón de mando” en agradecimiento al apoyo de los ciudadanos por construirles las nuevas viviendas y de ahí, en privado, en compañía con el gobernador Rubén Rocha Moya y gente de Conagua recorrió la presa para verificar los avances.
Una vez que el presidente de la República concluyó con su gira de trabajo, regresó al Aeropuerto Internacional de Mazatlán “Gral. Rafael Buelna” para tomar un vuelo e irse a la Ciudad de México. No sin antes, dar a conocer que es muy posible que en tres meses más estará de regreso a Sinaloa.
