Mazatlán, Sinaloa. – Por la creciente de los ríos de Las Cañas en Escuinapa y Baluarte, en El Rosario hubo grandes pérdidas en enseres domésticos para los habitantes de diferentes pueblos porque el nivel del agua alcanzó a más de 1.5 metros de altura dentro de las viviendas. Por fortuna, se puede hablar de un saldo blanco en cuestión de vidas humanas, declaró Leonardo González Neri.
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El gerente de Protección a la Infraestructura y Atención de Emergencia de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) afirmó que el peligro de las inundaciones ya paso en estos dos municipios del sur de Sinaloa porque el nivel del agua de los ríos ha descendido considerablemente.
Explicó que la cuestión de la Declaratoria de Emergencia es un asunto que le corresponde al gobierno del Estado solicitar a la federación ante la coordinación nacional de Protección Civil para que Conagua inicie con la evaluación técnica, a fin de empezar con los trámites y procedimientos correspondientes.
“Sí se afectaron muchos, pues básicamente enseres domésticos porque el agua alcanzó niveles superiores a un metro y de todo esto, lo más satisfactorio es el hecho de que hay saldo blanco en cuanto a daños humanos”
“…o sea, indiscutiblemente esto es una coordinación interinstitucional de los tres órdenes de gobierno, no hay ninguna perdida ni afectaciones humanas”. apuntó.
González Neri precisó que en el caso de Mazatlán no hubo grandes afectaciones en el tema de las inundaciones, Lo que sí, es que Conagua facilitó cuatro pipas para la limpieza del lodo de la colonia Jacarandas e instaló una bomba en el fraccionamiento Flamingos para desfogar el agua de esa zona.
“Aquí en Mazatlán ya se rehabilitó todo, pero nosotros todavía el día de ayer estuvimos trabajando con cuatro pipas para coadyuvar en la limpieza del fraccionamiento Jacarandas y ahorita se instaló, hoy, una bomba en Flamingos para estar desalojando todavía ese punto de anegación aquí en Mazatlán”, dijo.
El gerente de Protección a la Infraestructura y Atención de Emergencia de la Conagua aclaró que para El Rosario y Escuinapa no fue necesario llevar equipo de bombeo ni nada, debido a que los niveles de los ríos descendieron rápidamente.
