Culiacán, Sin.- Lo mejor es que un enfermo terminal conozca su diagnóstico, incluso que va a morir, esto le brinda la posibilidad de que elija un tratamiento paliativo para minimizar su sufrimiento, o bien que decida lo más conveniente en sus últimos días de su vida, señaló el Dr. Héctor Miguel Esquer Guzmán, especialista en medicina del dolor e intervencionismo, cuidados paliativos y anestesiología.
“Siempre se recomienda que se informe al paciente de la enfermedad, y de su pronóstico, y de los posibles tratamientos, porque esto nos va a dejar sin duda un mejor sabor de boca cuando la enfermedad termine, la otra cosa es que el tener claridad en esto, inclusive para los cuidadores les va a dar una mejor sensación cuando la enfermedad se acabe, muy seguramente el tener esa objetividad, nos va ayudar a que el tratamiento sea lo mejor”, dijo.
Explicó que ante el dolor que representa para los familiares un diagnóstico mortal, deciden ocultarle la información al paciente, a lo que se le conoce como conspiración del silencio.
“Muchas veces cuando escuchamos, de hecho, hasta el título de conspiración del silencio, es como un acto de telenovela, y justamente sí pasa en la vida real, a veces el querer ocultar información tan importante a un paciente, complica mucho a veces hasta el tratamiento, inclusive, se vuelve todo un caos, pero básicamente cuando hablamos de conspiración del silencio entendemos que es que todo mundo sabe que la enfermedad del paciente es algo terminal, excepto el mismo paciente”, expresó.
Detalló que el paciente que conoce su estado de salud, tienen un control sintomático adecuado, y a la vez que conservan el mayor grado de control sobre las decisiones de sus cuidados.
“De manera puntual, yo creo que aquí hay que siempre platicar entre todos, que toda la familia esté bien informada, que todos estén en la misma dirección, poderse sentar desde antes y decir miren la situación es ésta, la enfermedad es ésta, y los posibles tratamientos son éstos, y el pronóstico de vida es a corto plazo, qué vamos a hacer aquí, siempre cuando damos esta información se recomienda que sea por un profesional que nos ayude para poder transmitir este tipo de mensajes”, precisó.
Señaló que el ocultamiento mutuo de la verdad o la conspiración de silencio impide establecer una adecuada comunicación interactiva entre el paciente y sus cuidadores e introduce un elemento de represión y aislamiento emocionales en unos momentos en los que el enfermo necesita comprensión, consuelo y apoyo.
“Yo creo que lo primero que hay que hacer es informarnos, si el miedo que tenemos es que no se deprima, valdría la pena reunirnos, platicar con una persona que estuviera preparada para poder manejar esta información, y poder, primero nosotros sentirnos tranquilos para poder decir esto a la persona, pero muy seguramente van a obtener mejores resultados de poder decir esto de manera abierta”, puntualizó.
El Dr. Héctor Miguel Esquer Guzmán, especialista en medicina del dolor e intervencionismo, añadió que si el paciente terminal conoce su verdadero estado de salud, podrá expresar bien sus sentimientos y dejará las cosas en orden antes de morir.
LM
