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Los Mochis, Sin.- Don Juan Rangel Ibarra, vecino del ejido Mochis, se aplicó por primera vez una dosis de la vacuna antiCOVID, durante esta etapa que la Secretaría de Bienestar habilitó para los jóvenes de entre 18 y 29 años.
Él tuvo que esperar todo este tiempo, no porque no creyera en la vacuna, sino porque padece de Parkinson, y esta enfermedad le impedía movilizarse a un centro de vacunación.
“Andaba enfermo del Parkinson, cuando recién me pegó no podía caminar bien y ahorita empiezo a moverme un poquito más ya con las pastillas, por eso me animé a venir ahorita.
“Yo ahorita no siento nada, que vengan, que se la pongan, porque es necesario”, dijo a Línea Directa.
En esta ocasión, don Juan, acompañado por su familia, esperó pacientemente ser valorado por el personal médico que participa en el centro de vacunación, ubicado en el salón de asambleas “Fabián Torres Hernández”.
Se le aplicó su dosis del laboratorio AstraZeneca y se mantuvo en observación sin que presentara algún problema.
Ya con su primera vacuna aplicada, dijo que se siente más seguro y esperará que se abran otras fechas para conseguir los refuerzos.
