Navolato, Sinaloa.- A los restauranteros de Altata, en Navolato, les cayó como una bomba el anuncio del cierre del malecón y las playas, porque provocará crisis y desempleo en el sector al impedir la llegada de turistas, lamentó Alma Rosa Alfaro Sánchez, conocida como “La Güera”, propietaria de un puesto de mariscos.
Consideró que es buena la medida para prevenir la proliferación de la enfermedad del coronavirus en Sinaloa, pero el gremio esperaba recuperarse económicamente con las vacaciones de Semana Santa.
“La Güera” de Altata señaló que tienen dos semanas con ventas muy bajas, sin embargo se ha hecho hasta lo imposible para mantener con un sueldo a los trabajadores que los apoyan, pero esto será difícil con esta medida de prohibir el ingreso de las familias al mar.
“Mira, nos cayó de bomba porque primero no iban a cerrar y después que sí, y anoche que ya habían cerrado, nada más hay dos negocios abiertos, pero sí nos cae Salubridad por no cumplir los requisitos de higiene nos van a clausurar”, externó.
Reveló que los 33 puestos de mariscos ubicados en el Muelle 33 ya cerraron por falta de clientes, y de los 15 restaurantes solo dos permanece abiertos al público, pero pronto bajarán la cortina.
Finalmente, se quejó de la burocracia en la Secretaria de Economía para otorgarles los créditos accesibles que anunció el gobernador Quirino Ordaz Coppel, ya que les piden muchos de requisitos que no son fáciles de cumplir, y menos cuando están cerradas oficinas de gobierno donde se expiden algunos documentos para integrar el expediente, entre ellos el Registro Civil y el Instituto Nacional Electoral para tramitar la credencial de elector, por poner dos ejemplos.
