Guasave, Sin.- Replegados, auto aislados con el temor al contagio de COVID-19 pero de manera exponencial, así han vivido niños diagnosticados con diabetes tipo 1 y de otro tipo de enfermedades, por ello, decididos a garantizarles la salud que el estado no les da, han iniciado con los amparos para generar jurisprudencia.
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Everardo Castro Castro, presidente de la fundación Grupo Beta en Guasave, manifestó que son parte de la campaña Por Mi Derecho a la Vacuna, a la que se han unido a nivel nacional, más de 20 organizaciones, porque saben que un contagio en estos casos eleva el riesgo de fallecer y aún así el gobierno federal no quiere responsabilizarse argumentando que los niños no son un sector vulnerable.
“Por el mismo riesgo exponencial que tenemos en la posibilidad de que podamos contraer coronavirus tenemos un riesgo mucho mayor que cualquier persona que no tenga nuestra condición, por eso es que estamos exigiendo la vacuna a los niños, que es una vergüenza que tengamos que estar nosotros promoviendo amparos cuando es un derecho el que tenemos a la salud y sobre todo como grupos vulnerables”, dijo.
La idea particularmente aquí en Guasave es promover esta campaña esperar a que prosperen los amparos que han promovido en Guadalajara, Veracruz y Nuevo León, principalmente, para entonces la Suprema Corte de Justicia ya habrá generado jurisprudencia que servirá para el resto de los niños que busquen protegerse.
Lamentó que estén pasando por esta situación, en una lucha contra quienes se suponen deberían garantizarles la salud; a la fecha más de 600 niños en México han fallecido por COVID-19 por diversas circunstancias.
