Culiacán, Sinaloa. – El presidente de la Federación de los Industriales de la Masa y Tortilla en Sinaloa, Rafael Uriarte Quiroz, confirmó el incremento al precio del kilogramo de tortilla hasta en 26 pesos, pero, adelantó que no será generalizado en el estado, ya que lo aplicarán únicamente los agremiados que solo elaboran menos de dos costales al día, de lo contrario, estarían obligados a cerrar su negocio por no ser redituable.
Comentó que ellos son los primeros en oponerse a que se aumente el costo de este alimento, ya que en automático les bajan las ventas en el mostrador, pero están obligados para poder mantener la generación de más 8 mil empleos en los 2 mil establecimientos en Sinaloa.
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El líder tortillero lamentó que a partir de marzo las compañías le subieron mil 300 pesos a la tonelada de harina de maíz para quedar en 18 mil 300, lo cual pone en serios problemas a los socios.
Rafael Uriarte mencionó que la recomendación que han hecho a los compañeros es que mantengan el precio entre 23 y 25 pesos el kilo, para no dañar la economía de las familias más vulnerables, pero, a la vez se requiere el apoyo del gobierno para que les pongan un alto a los empresarios de la harina, que sin justificación alguna dan este golpe a los clientes.
“Pero es una situación que es responsabilidad de cada compañero de incrementar el precio del kilo de tortilla, pero, resumiendo todo esto vamos a tratar pues se aguante lo más que se pueda con el precio de 23, 25 y 25 pesos que creo que sería la mayor parte del estado, lo que es Guasave y Los Mochis no habrá ningún negocio arriba de los 25 pesos”, prometió.
Finalmente, Uriarte Quiroz externó que a este aumento a la masa se suman los ajustes que se han tenido en el gas, gasolina, energía eléctrica, papel, y los nuevos impuestos fiscales y las reformas a la ley del trabajo con más vacaciones para los empleados.
