Culiacán, Sinaloa. En un esfuerzo por fortalecer la producción agrícola y apoyar a los productores, el Gobierno de Sinaloa comenzó este lunes 10 de junio la entrega de fertilizantes bajo el programa “Fertilizantes para el Bienestar”.
Este proyecto tiene como objetivo proporcionar insumos a los agricultores para mejorar la productividad de sus tierras y asegurar la suficiencia alimentaria en la región.
Durante su conferencia “semanera”, el gobernador Rubén Rocha Moya destacó la importancia de esta iniciativa, que contempla la distribución de fertilizantes a pequeños y medianos agricultores que enfrentan dificultades para acceder a estos productos debido a su alto costo en el mercado.
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En esta edición del programa, se estima que miles de agricultores serán beneficiados al recibir fertilizantes que les permitirán aumentar el rendimiento de sus cultivos.
En total se contemplan 38 mil 157 productores de temporal y 17 mil 354 de riego, lo que da un total de 55 mil 511 productores que se verán beneficiados, detalló el mandatario estatal.
“Hoy empieza, se está distribuyendo ya el fertilizante, y el programa dura de aquí a agosto. Se van a repartir 105 mil 539 toneladas, 300 kilos por hectárea: 150 kilogramos de fósforo y 150 kilogramos de urea, que sumados dan 300 kilogramos por hectárea de fertilizantes.
Simplemente les digo, no baja de 30 mil pesos el apoyo por productor”, comentó.
Detalló que se trata de más de mil 600 millones de pesos en apoyo solo para Sinaloa. Asimismo, resaltó que el proyecto ha sido posible gracias a la colaboración entre el gobierno estatal y federal.
El gobernador Rubén Rocha Moya subrayó la relevancia de estos programas en el contexto de la reforma a la Ley de Desarrollo Sustentable recientemente aprobada que reglamenta las condiciones para el desarrollo rural sustentable y permitirá organizar la producción agropecuaria.
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Destacó que dicha reforma contempla varios puntos clave, entre los que sobresale la inclusión de las personas que participan en la producción, transporte, distribución y comercialización de productos, insumos y fertilizantes como agentes de la sociedad rural. Esto significa que los agricultores, transportistas y distribuidores tendrán un papel más activo y reconocido en el ámbito rural, fortaleciendo así la cadena productiva desde sus cimientos.
Uno de los aspectos más relevantes de la reforma es la declaración de interés social y orden público a la cadena de producción de fertilizantes en el país. Este reconocimiento permitirá que la producción de fertilizantes se convierta en una prioridad nacional con el objetivo de asegurar la disponibilidad de estos insumos esenciales para la agricultura.
Asimismo, los fertilizantes se incorporan dentro de las estrategias y actividades del Estado, lo que implica un mayor compromiso gubernamental en su producción y distribución. Esta medida no solo busca mejorar la producción agrícola, sino también reducir la dependencia de insumos importados.
La reforma también promueve la inversión de los sectores sociales y privados en el impulso de actividades no agropecuarias, específicamente la producción de fertilizantes. Esta iniciativa espera atraer capital y tecnología que puedan contribuir al crecimiento del sector y a la creación de empleo en áreas rurales.
Finalmente, la disminución de la importación de insumos y fertilizantes se presenta como una condición adecuada para enfrentar el proceso de globalización. Al reducir la dependencia de productos extranjeros, se espera fortalecer la economía local y aumentar la autosuficiencia del país en términos de insumos agrícolas.