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Mazatlán, Sin.- Sólo desfiguros de viviendas en el fraccionamiento CVive, carente de servicios básicos y espacios adecuados, es lo que heredó Quirino Ordaz Coppel a los desplazados de la violencia en el sur de Sinaloa, y que a cien días de esta nueva administración estatal que encabeza Rubén Rocha Moya, hay nada más presta oídos sordos, denunciaron afectados.
Miguel Ángel Gutiérrez, integrante del Movimiento Amplio Social Sinaloense, dijo que los espacios donde construyeron estos inmuebles se realizaron en terrenos inhóspitos, por lo cual no exigen privilegios, sino que haya justicia para estas familias, que hace años fueron despojadas de sus pertenencias en la zona serrana, ante la mano armada de grupos delictivos.
“Estos son los que ya ganaron, estos son las que ya la hicieron, estos son los que tienen casa, pero así están las casas no tienen escrituras, ya las pagaron, cinco mil pesos, pero no se las han entregado, no están escrituradas. Esta luz que tienen es colectiva, no es particular, el que tiene un foco paga igual que el que tiene un aire acondicionado, que deberían tener aire acondicionado todos, no porque sean desplazados no tienen derecho a no tenerlo, ahí iba una banqueta, tampoco se hizo, no hay alumbrado público, fíjense donde estamos, pregúntense de aquí en cuánto tiempo llegamos al hospital Civil”.
Los vecinos mostraron el interior de sus viviendas terrenos de seis metros de ancho por 20 de largo, y que desde hace ocho meses habitan, pero que ha costado adaptarse por el espacio, y en otras por carecer de lo elemental, donde la autoridad estatal, que llegó en noviembre pasado sólo les plantó un árbol, frente a sus casas, pero nada ha hecho por corregir las fallas de las viviendas.
“Compañeros nada más 50 familias para tantas familias que hay en realidad, y como quien dice no tenemos nada, nosotros vamos a hacer una convocatoria para invitar a las personas que no tienen un techo donde estar, todas las personas que han bajado, que son desplazadas y personas colonos de aquí de Mazatlán que nos busquen y que vamos a atenderlos para ver la manera de que tengan una vivienda digna donde vivir”.
La triste realidad está a todas luces en este fraccionamiento CVIVE, ante los errores hechos en las viviendas, dijeron los desplazados de la violencia, de terrenos que adquirió el Gobierno estatal pasado, a 3 millones y medio de pesos, y donde siguen careciendo de lo más elemental, como es agua, alumbrado público, sin dejar de lado la distancia y el olvido que sigue estando en el puerto de Mazatlán.
Advirtieron que, si no hay atención ni solución como hasta el momento, el domingo de Carnaval, haya o no fiesta en el puerto, ellos, encabezados por los más ancianos y niños, víctimas todos de la violencia de las comunidades de la zona serrana de Sinaloa, saldrán a manifestarse en el malecón para exigir ser escuchados.