Guasave, Sinaloa. Sometido a una cirugía cuando tenía tres años por un diagnóstico de reflujo gastroesofágico, Manuelito, de 8 años, ha enfrentado todo un peregrinar ya que un supuesto error quirúrgico le dejó cerrado el estómago, solo le dejaron un orificio de 7 milímetros que con el tiempo complicó su situación.
La madre explicó que los cirujanos en Guasave le ofrecieron realizar otra operación, pero advirtieron que no había garantías de éxito, lo que los llevó a trasladar al niño a Guadalajara. Allí, después de tres meses de tratamiento los médicos afirmaron que el niño estaría bien, pero las complicaciones no tardaron en reaparecer.
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“El niño ha tenido recaídas y recaídas; ahora, después de cinco años nos han dicho que hay un 90 por ciento de posibilidades de que necesite otra operación”, comentó la madre visiblemente afectada por la situación.
“Cuando lo operaron le dejaron un orificio de siete milímetros en el estómago para poder comer, solo podía ingerir líquidos como gelatina”, relató la madre del menor, quien ha estado luchando para que su hijo reciba la atención médica que necesita. A pesar de las dilataciones que se le realizaron en Guadalajara, el niño ha sufrido recaídas continuas en los últimos cinco años, lo que ha llevado a la familia a buscar nuevas intervenciones quirúrgicas.
El 22 de septiembre el niño será internado en el Centro Médico de Occidente del IMSS en Guadalajara para ser sometido a estudios adicionales antes de la cirugía.
“No se van a esperar a los demás estudios, lo van a internar para hacerle con actividad los estudios”, indicó la madre, quien también mencionó que su hijo ha estado experimentando síntomas graves como mareos, vómitos y náuseas.
“Ayer que llegamos, el niño me dijo mamá, me siento bien mareado, y de repente se cayó y se lastimó un brazo”, relató.
El estrés y la carga económica han sido abrumadores para la familia. La madre, quien tiene otros cuatro hijos, ha estado viajando sola a Guadalajara cada 10 días para acompañar a su hijo en su tratamiento.
“La ayuda económica que necesito no es para la cirugía, sino para poder costear las estancias y los viajes. Estoy muy cansada, he estado viniendo cada 10 días a Guadalajara, y la verdad no encuentro ya ni la puerta”, confesó, subrayando la desesperación que siente ante la falta de recursos para continuar con los cuidados que su hijo requiere.
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A pesar de las dificultades la familia no ha iniciado acciones legales en contra de los médicos responsables del error inicial.
“Nosotros no quisimos denunciar, lo único que queríamos era que el niño se aliviara”, explicó la madre. Sin embargo, ahora que las complicaciones persisten, la preocupación por el futuro de su hijo es mayor que nunca.
“El médico me dijo que debo prepararme para todo, porque la operación es de alto riesgo”, agregó.
Shower médico en apoyo a Manuelito
Este sábado 31 de agosto Manuelito te espera en el malecón de Guasave “María del Rosario Espinoza”, su familia y amigos le organizaron un shower médico a partir de las 18:00 horas, o bien, puedes apoyarle donando una cantidad a la cuenta 41891432342665 de Banorte.
