Guasave, Sinaloa. En un reciente anuncio la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, dio a conocer de la congelación de saldos y mensualidades en créditos contraídos con el Infonavit, sobre ello, la diputada federal Anya Ayala explicó el impacto de la nueva medida permitirá a los trabajadores ver una reducción real en sus deudas, ya que se detendrá la actualización anual de los montos, facilitando el camino hacia la propiedad de vivienda.
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Esta iniciativa no es completamente nueva, ya que en años anteriores se había anunciado un beneficio similar para quienes convertían sus créditos a pesos. Sin embargo, Ayala subrayó que esta congelación es un paso adicional.
“Antes, los trabajadores podían optar por convertir su deuda a pesos, evitando así los incrementos en función de las unidades de medida y actualización (UMA). Pero, aunque se beneficiaban de esa conversión, las deudas continuaban actualizándose anualmente por la inflación, impidiendo a muchos reducir sus saldos efectivamente. Esta medida da un respiro importante a los trabajadores que, cada enero, veían cómo su deuda crecía sin importar cuánto hubieran pagado durante el año. Al eliminarse la actualización anual, cada peso que el trabajador aporte reducirá directamente su saldo y, por primera vez, permitirá vislumbrar una fecha de liquidación en lugar de solo extenderse indefinidamente”, explicó.
Con esta nueva disposición, el saldo de los créditos hipotecarios de los trabajadores ya no aumentará cada enero, como sucedía anteriormente, detalló que en años pasados, los créditos se veían afectados al iniciar el nuevo ejercicio anual, provocando que los trabajadores comenzaran el año con un incremento significativo en su deuda.
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Ana Ayala subrayó que, aunque la medida mantiene el monto de las mensualidades sin cambios, la congelación del saldo beneficia en gran medida a quienes aún no habían logrado ver una reducción significativa de su deuda. En términos prácticos, si un trabajador realiza pagos mensuales o quincenales a lo largo del año, estos serán reflejados en la disminución del saldo total, y no se incrementarán al llegar el nuevo año fiscal.
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Anteriormente, según detalló la diputada, un crédito promedio de vivienda por valor de 500 mil pesos podía experimentar un aumento de hasta 60 mil anuales debido a la inflación. Ahora, con la congelación, esta actualización desaparecerá, permitiendo que cada abono contribuya de manera tangible a disminuir el monto de la deuda.
Con esta disposición, se espera que los trabajadores puedan obtener sus escrituras en un tiempo menor al contemplado anteriormente, ya que la deuda disminuirá conforme se realicen los pagos, y no seguirá creciendo año con año. “Esta medida no solo facilita el pago del crédito, sino que ofrece una certeza para el trabajador sobre su propiedad. Una vez concluido el crédito, los trabajadores podrán disponer de su vivienda como un bien privado, bien sea para cederlo a sus hijos, venderlo o realizar cualquier otro trámite sin las limitantes de una deuda perpetua”, puntualizó Ayala.
Para los trabajadores, esta política representa un cambio significativo en la administración de sus créditos de vivienda. La certeza de que el saldo se mantendrá congelado y que cada pago contará directamente para la reducción del saldo total es una ventaja tangible. Este tipo de cambios brinda un nuevo horizonte para los beneficiarios de Infonavit, quienes, según la diputada, ahora pueden visualizar el final de sus créditos y tomar decisiones informadas sobre el manejo de su patrimonio.
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Esta medida de congelación de saldos de Infonavit busca beneficiar a los trabajadores de México, promoviendo la estabilidad financiera y la certeza en la adquisición de vivienda. Los créditos que antes se extendían por décadas ahora ofrecen una perspectiva más clara y concreta hacia la propiedad total, un avance que muchos consideran fundamental para el bienestar de los derechohabientes y sus familias.