Mazatlán, Sin.– En un acto de rebeldía, al menos 12 menores de edad en los últimos meses han acudido ante el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia en Mazatlán, para denunciar a sus padres, unos por la cuestión de la prohibición de sus equipos de celular o por ajustarlos a reglas domésticas, reveló Gabriela Peña Chico.
No obstante, la presidenta del DIF Mazatlán, aclaró que ninguna de las quejas de los adolescentes corresponde a agresiones físicas o maltrato familiar, sino a cuestiones de rebeldía que muestran y sus padres sólo buscan corregirlos.
Indicó que a través de las redes sociales, en la mayoría de los casos, estos menores exponen sus denuncias y los hacen llegar al DIF, donde la procuradora de la Defensa del Menor toma cartas en el asunto y los ha ido canalizando con los psicólogos para abordar el tema con los jóvenes.
Peña Chico dijo que finalmente cada caso es distinto, según sus condiciones de vida en casa, pero coinciden en que los adolescentes se molestan porque los limitan en el uso de sus tablets, computadoras o celulares, con base a horarios o hagan una disciplina de responsabilidad en su quehacer diario, lo cual se sienten agredidos, al grado de decirle a sus papás que serán denunciados al DIF y cumplen con su palabra.
La presidenta del organismo municipal, recordó que están en la edad de la rebeldía y algunas cosas no les gustan o les parecen mal, por eso los denuncian.
Dijo que luego de unas horas de recibirse las denuncias de los adolescentes, concilian con sus padres y todo vuelve a la normalidad.
