Mazatlán, Sin.- Este martes 15 de agosto falleció el pintor y escultor mazatleco Antonio López Sáenz, un artista que siempre tuvo a su tierra como inspiración y logró trascender su obra en lienzos, barro y bronce a nivel internacional con infinidad de reconocimientos.
El fallecimiento del mazatleco que nació en 1936 y que recorría las calles del Centro Histórico a bordo de su bicicleta saludando aquí y allá a quien se encontraba en su camino, fue confirmado por el Instituto Municipal de Cultura, Arte y Turismo.
De acuerdo a la página del Instituto de Cultura, en las manos López Sáenz las pinturas cobraban forma de mujeres, hombres, barcos, mar y están llenas de vida, música de banda, beisbol y carnaval.
Monumento del beisbolista.
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Sus cuadros son postales llenas de memoria y añoranza.
Él mismo refirió que crea con lo que ha visto desde niño: los paisajes, los estampados de los vestidos de su mamá y sus tías que se reunían por las tardes a platicar sentadas en poltronas.
Los personajes en su obra no tienen rostro, así lo decidió López Sáenz: dejar en el anonimato a quienes viven dentro de los lienzos, conociendo él solamente a los actores verdaderos de cada obra.
Su infancia transcurrió en la playa, en donde jugaba con sus amigos y fue ahí en donde encausó por primera vez su talento: sobre la arena. Tomó una vara y comenzó a dibujar la silueta de un hombre.
Estaba en la primaria cuando se dio cuenta que su destino estaba en la expresión plástica, por situaciones familiares comenzó a trabajar en los muelles cargueros, y fue hasta los 17 años cuando viajó a la Ciudad de México para estudiar pintura en la Academia de San Carlos.
En las manos López Sáenz las pinturas cobraban forma de mujeres, hombres, barcos, mar y están llenas de vida, música de banda, beisbol y carnaval.
Ahí cursó las carreras de Maestro en Artes Plásticas e Historia del Arte.
Han pasado casi 50 años desde que aquel joven partió lleno de ilusiones a estudiar a la Ciudad de México. Hoy su carrera se ha consolidado y ha expuesto su obra en Sinaloa, Nuevo León, Distrito Federal, Jalisco y Morelos, y fuera del país en Washington, Detroit, Miami, Tampa, San Francisco, San Antonio, Chicago, Madrid, Lisboa, Zúrich y París.
Don Antonio López Sáenz fue cronista gráfico de la ciudad de Mazatlán, en su obra se inmortaliza el espíritu del Mazatlán de su niñez. A través de sus ojos, sus manos y su talento, somos testigos de una tierra que ha sido generosa, llena de luz y alegría.
Su obra fue imagen de la Serie del Caribe Mazatlán 2005 y del Carnaval de Mazatlán 2005. La escultura “Así nos agarró el milenio”, popularmente conocida como “Monumento a la familia” ya es parte fundamental de la fisonomía del puerto. Otra de sus obras, “Los beisbolistas”, también rinde tributo permanentemente al triunfo de los Venados de Mazatlán en la Serie del Caribe de este año.
Monumento a la familia en Mazatlán.
Los restos del maestro que también inspiró el Premio Bienal de las Artes Antonio López Sáenz, que se celebra durante el Carnaval Internacional de Mazatlán, serán velados en la funeraria Renacimiento de la colonia Centro, a partir de las 7:00 de la noche.
¡Descanse en paz!
