Choix, Sin. – A pie, en carrucha y vehículo, como sea buscan agua purificada y embotellada los habitantes de Choix porque se encuentran desesperados por garantizar que esté limpia y sin riesgos para beberla, preparar los alimentos y hasta bañarse, debido a la contingencia sanitaria.
Sin embargo, debido a la alta demanda de la población por el líquido, que padece del desabasto desde el viernes, algunos trabajadores de empresas embotelladoras de agua purificada están haciendo prácticamente su “agosto”, vendiendo hasta en 130 pesos los garrafones llenos.
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La regidora Yoneida Gámez Vázquez lamentó el trato abusivo hacia la población de la cabecera municipal, pues, aseguró, no todas las familias pueden pagar esa cantidad por un garrafón de agua purificada.
“Nos están vendiendo el garrafón de agua a 140 pesos, a lo mejor hay personas que tenemos la posibilidad de comprarla, pero hay quienes no, y habrá quién tiene la posibilidad, pero el agua se va a agotar, porque creo que han hecho dos viajes, los camiones vienen y se paran allá en el centro y la gente llega en carros y caminando, y en carruchas, porque hay una sicosis”, dijo la funcionaria.
Añadió que en la cabecera municipal se vive un ambiente de miedo entre la población, luego de la alerta sanitaria que emitió la Coepriss, autoridad que prohibió el uso del agua de la tubería para beber, lavar platos, preparar alimentos e, incluso, bañarse.
La desesperación de las personas por conseguir agua, es debido a que no se sabe hasta cuándo pasará el riesgo microbiológico, lo permite que algunos vendedores abusivos aumenten tanto el precio de los garrafones de agua purificada.
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Pero, también, la contingencia ha sacado a relucir el lado más humano de la población, algunas personas como Flor Soto, una ciudadana de Choix, está compartiendo de manera gratuita agua de su noria para las personas que no pueden comprar agua, en un acto de empatía en medio de la desesperación por conseguir el líquido.
