Guasave, Sin.- Cada año, especialmente durante celebraciones como Año Nuevo o festividades patrias, es común escuchar disparos al aire como símbolo de júbilo en distintas partes del mundo. Sin embargo, esta práctica lejos de ser inofensiva representa un grave peligro para la vida de las personas.
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La Secretaría de Seguridad Ciudadana y Movilidad Sustentable dio a conocer a través de una circular que, cuando un arma de fuego es disparada al aire, la bala puede alcanzar hasta 1.6 kilómetros de altura, dependiendo del ángulo del disparo y la potencia del arma. Sin embargo, lo que sube debe bajar. La bala regresa a la tierra con una velocidad suficiente para causar lesiones graves o incluso la muerte, ya que su diseño aerodinámico le permite mantener una trayectoria letal.
Es común escuchar disparos al aire como símbolo de júbilo en distintas partes del mundo | Foto: Cortesía
Estudios balísticos señalan que una velocidad de 61 metros por segundo es suficiente para penetrar el cráneo humano. Aunque la resistencia del aire limita la velocidad de descenso, las balas están diseñadas para ser altamente aerodinámicas, lo que significa que pueden conservar una fuerza mortal al impactar contra una persona.
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Casos de tragedias por balas perdidas se han reportado en distintas partes del estado, desde lesiones fatales hasta muertes de niños y adultos que ni siquiera estaban cerca del lugar del disparo. Por ello, es crucial concienciar sobre el riesgo y erradicar esta peligrosa tradición.
En México, disparar al aire no solo pone en riesgo vidas, sino que también constituye un delito penado por la ley. Las autoridades han hecho llamados constantes para evitar esta práctica, resaltando la responsabilidad que implica el manejo de armas de fuego.
La prevención comienza con la educación. Es vital que la población entienda que las balas no desaparecen al ser disparadas al aire, y que cualquier celebración puede convertirse en una tragedia si no se toman las debidas precauciones.
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Celebrar Navidad o Año Nuevo no debe costar vidas. La solución está en promover alternativas seguras para manifestar la alegría y en denunciar a quienes realizan disparos al aire. De esta forma, se puede prevenir que estas prácticas imprudentes sigan dejando un saldo fatal en las festividades.
