Mazatlán, Sinaloa.- Con el fin de celebrar al santo de la juventud, San Juan Bosco, el grupo de salesianos y algunos menores se reunieron en la Catedral de la Inmaculada Concepción en Mazatlán para, frente a las reliquias de éste, presenciar una misa y así agradecerle por todos sus milagros.
Durante el recorrido, algunos jóvenes aseguraron que este santo les cambió su vida, ya que su corazón anteriormente estaba atormentado por la rebeldía, la angustia e incluso la tristeza y el unirse a la fe, los ayudo a salir del camino de la perdición.
“Para mí Don Bosco, me cambio la vida. Desde que yo entre a este grupo conocí lo que era vivir la vida más bien, porque yo antes era una niña muy rebelde”.
“Fue un gran cambio que fue en m corazón de tener a alguien que nos represente para poder ayudar a jóvenes”.
A su vez, los feligreses se reunieron para agradecerle su labor y celebrar la vida de la salesiana cooperadora, Alessandrina da Costa, así como aplaudir un natalicio más de San Juan Bosco, hombre que en vida se dedicó a ayudar y proteger a los jóvenes, motivo por el que ahora es un santo.