Los Mochis, Sin.- Desde el 2020, durante la pandemia de Covid-19, comenzaron a popularizarse las aplicaciones electrónicas de préstamos o “montadeudas” en México, la cuales lucían como un verdadero sueño porque exigían mínimos requisitos a cambio del depósito del recurso económico. Sin embargo, miles de personas en el país han vivido la peor de sus pesadillas por los métodos de cobros a través del hostigamiento excesivo hasta la difamación con acusaciones graves que dañan su imagen pública ante familiares, amigos y conocidos.
Este año, Jesús “N” pasó por un duro proceso económico lo que causó bastantes dificultades para sacar adelante a su familia. Navegando por sus redes sociales se encontró con un anuncio que ofrecía bajar una aplicación en su equipo móvil para solicitar un préstamo, el cual recibiría en cuestión de minutos directamente a cuenta de tarjeta bancaria y tendría 6 días para pagar.
Desesperado bajó la app y descubrió que el proceso para el crédito era muy fácil, solamente le pedía su credencial de elector, dos números de contactos muy cercanos y una fotografía para el reconocimiento fácil y aceptar los permisos para que la app tuviera acceso al móvil.
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Ahí mismo ingresó su número de tarjeta bancaria y en cuestión de minutos ya tenía 800 peso disponibles para salir delante de sus responsabilidades como padre de familia.
Aunque logró salir de la situación que lo aquejaba, cada que tenía algún problema recurría a la aplicación, hasta que un día se retrasó con el pago, porque estas empresas fijan un plazo de 6 días para reponer el efectivo, y comenzó todo un acoso psicológico que mermó hasta su salud.
“Si tú te pasas un día o dos días, empieza esa situación por la cual muchas personas han pasado por lo mismo que yo he pasado, como es el acoso, es un abuso psicológico, no creas que se tocan el corazón para decirte las cosas”, expuso el joven padre de familia a Línea Directa.
Para evitar el acoso telefónico y hostigamiento a los contactos de tu libreta de tu equipo, las apps ofrecen una “extensión”, la cual consiste en aceptar la propuesta de pago de ellos, “te dicen, te presté tanto, tú págame tanto y te doy 6 días más para que acompletes. Entonces, ‘habemos’ personas que cometemos el error, porque, dices, bueno, pago la extensión y llega la quincena y pago”.
Paralelamente a la psicosis que generan las acciones de cobro a través de mensajes, llamadas y agresión verbal, estas empresas tienen otras aplicaciones subsecuentes que se publicitan ante las víctimas, ofreciéndoles más préstamos para salir adelante de las deudas adquiridas en la primera aplicación.
“Hay más de 135 aplicaciones, de las cuales hay 10 empresas, entre comillas, entre ellas japonesas y mexicanas, que fue lo que yo investigué con base a lo que me pasó, que tienen 10 aplicaciones cada una, tienen tanta lógica en el aspecto de que no se contradice una con la otra, entonces, qué haces, tú le pides a una y la otra te dice, oye, si quieres pagar tus deudas… te bombardean con mensajes de texto, te marcan a las 6 de la mañana, 8 de la mañana, te están acosando todo el día”, explicó Jesús “N”.
Sin embargo, lejos de encontrar una solución, estas aplicaciones van mermando la estabilidad emocional de las víctimas, al punto de que, si éstas dejan de contestar sus equipos telefónicos, aplican el método más agresivo: usar su fotografía de reconocimiento fácil y datos de su INE para crear imágenes falsas con acusaciones como delitos sexuales, deudores alimentarios, entre otros, y la envían como spam a todos los contactos registrados en el equipo telefónico.
“Desafortunadamente dentro de los rangos de la aplicación te van diciendo que es un contrato electrónico, tienen derecho a agarrar tus contactos, pones dos contactos de prioridad, pero ellos agarran tu libreta directamente de tu teléfono y empiezan a hacer todo lo que hacen”.
Ante la situación vivida que le causó algunas afectaciones en su salud, Jesús exhorta a las personas a evitar caer en estas trampas que se publicitan en redes sociales y mejor buscar otras alternativas para sacar adelante a la familia.
“Con esas cosas prefiero vivir al día… yo invito a la gente y lo digo sinceramente, de corazón, sí es algo muy pesado, te traen en una presión que te afecta en el trabajo, te afecta en la familia, te afecta en todo. Invitar a la gente que analice, si tienes una necesidad, pues, buscan de otra manera”, dijo.
Lo mejor para evitar ser víctimas de este tipo de aplicaciones que sirven de pantalla a toda una red de extorsionadores es evitar su descarga, porque, estas plataformas operan en la ilegalidad y no cuentan con una vigilancia regulada por las autoridades, de hecho, las víctimas que han interpuesto denuncia ante la Fiscalía General de Justicia en Sinaloa señalan que las propias autoridades les indicaron que es muy difícil que puedan actuar contra los responsables.