Con el último pase de lista, Alejandro Pimentel se despide del Stashag, la casa donde tejió sus luchas

Guasave, Sin. Eran casi las 16:00 horas cuando la carroza con los restos mortales de Alejandro Pimentel Medina, acompañados por su viuda, hijos, sobrinos y hermanos, entraron a la casa sindical del Stashag, lugar donde por casi dos décadas tejió las numerosas luchas sindicales que encabezó contra el Gobierno Municipal, donde forjó los lazos de unión con sus agremiados y donde paradójicamente fue despojado, corrido y arrestado en sus últimos meses de liderazgo.

Ahí estaban la gran mayoría de los sindicalizados del Stashag, activos, jubilados, escoltando el último recorrido en materia del histórico y controversial, siempre fuerte ex secretario general Alejandro Pimentel Medina; muchos sollozando al ver al acaecido dentro de un féretro con su foto montado en su caballo “El Palomino”, otros más le lloraron abrazando su ataúd, en medio de la cancha donde infinidad de veces presidió las asambleas generales.

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Los aplausos no faltaron, tampoco las guardias de honor de sus amigos incondicionales y leales, Guerreros Azules rápidamente pasaron a formar parte, así como de quienes al final llamó enemigos, pues resguardaron sus restos mortales integrantes el comité directivo que ahora encabeza María José García Flores, también en reconocimiento al liderazgo y por los años entregados procurando el cumplimiento de los derechos de los trabajadores.

La secretaria del trabajo en el sindicato, tomó el micrófono para el pase de lista, nombró al segundo y su voz se cortó, agarró aire y con fuerza nombró a Alejandro Pimentel Medina, tres veces todos gritaron su nombre en homenaje, a lo que dejó y a lo que fue para el Sindicato de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento de Guasave.

“Alejandro Pimentel Medina
– ¡presente!
– Alejandro Pimentel Medina
– ¡presente!
– Alejandro Pimentel Medina
– ¡presente! (aplausos)”

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Yesenia Rojo Carrizoza, fue la única que dio unas palabras de despedida, frente a todos, dejando en claro que no cualquiera nace con el don de liderazgo, algo que reconoció que caracterizaba a Alejandro Pimentel, con esto, agregó que sin duda Guasave tuvo la oportunidad de tener un gran líder, nato como al que hoy lamentan su muerte.

Y en una sola voz, entonaron el grito de lucha, el que en muchas batallas sindicales impusieron su fortaleza de unidad frente a cualquier patrón que llegara a la administración: “Stashag, Stashag, Stashag”, exclamaron con lágrimas en sus rostros, en recuerdo de aquellos momentos difíciles en donde irrumpieron reuniones de alcaldes, sesiones de cabildo, marchas, plantones, estallamientos de huelga, todos siguiendo al dirigente obrero. Y así, en un ambiente de dolor, homenaje y reconocimiento el viejo sindicato dio el último adiós a Alejandro Pimentel Medina.