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Culiacán, Sin.- Con el lema “Aquí nadie olvida, Javier Valdez vive” se realizó la jornada cultural por el quinto aniversario del asesinato del periodista y escritor Javier Valdez Cárdenas que incluyó con el mural en la pared del estacionamiento el PRD por parte de Recuperarte.
Los dirigentes de Propuesta Cívica, Sara Mendiola; Balbina Flores, de Periodistas sin fronteras; y Jean Albert Hootsen, del Comité de Protección a Periodistas, y Tania Valdez, la hija de Javier, leyeron textos de “Malayerba”, “Periodismo escrito con sangre”, “Huérfanos del narco” y “Narco periodismo”, de Javier Valdez, en la jornada cultural, previo a la inauguración del mural.
Las lecturas de las obras de Javier las abrió su hija mayor, Tania Valdez Triana, con la historia de un joven de la barriada donde uno de sus amigos le propuso robar carros, ya con armas se hicieron adictos a la adrenalina, a amenazar para que no denunciaran. Así sin nombre, ni presente ni pasado con autoridad impuesta a punta de pistola hasta que fue levantado cuando le quitó la camioneta a una bella joven, quien solo hizo una llamada y llegó un convoy de patrullas que se llevaron y hasta ahí ya no se supo más.
Leyó Sara Lidia Mendiola Landeros, directora de propuesta Cívica, los comentarios de Javier en su libro “Periodismo escrito con sangre” donde expresa que en Veracruz, encontró la sucursal del infierno en cinco pisos abajo con “Narco política”. Una sociedad que no protesta, la corrupción, sin embargo, los periodistas resisten, escriben historias, hacen trabajo de equipo, se cuidan y a pesar de ello los siguen matando y persiguiendo.
Todo esto fue para mí como trabajar con el techo encima, sin espacios para moverme, a punto de la asfixia, se trata del periodismo posible, en condiciones imposibles. Dentro de mí hay un cabrón que es pesimista, apesadumbrado, un tanto amargado al que le molesta que echen a perder sus soledades, pero sueña, tengo la idea de otro país para mi familia y los mexicanos que no sigan cayendo en un abismo, del que quizá no haya retorno, expresa de la lectura.
“A veces me siento cansado y triste porque gran parte de la sociedad no acompaña al buen periodismo, parece no importarle que maten o desaparecen activistas y periodistas, pero también me alimento de otras luchas, de la gente que se atreve a hablar y dar su testimonio”, dice al referirse al texto de Javier.
Balbina Flores Martínez, de Reporteros sin Fronteras, también leyó otro de los fragmentos del “Bitache”, del joven que probó a temprana edad la droga, luego la vendió hasta que sus pasos lo llevaron al narcomenudeo, un pequeño narco de barrio en acenso, siempre un peligro para los que están un escalón arriba, le dio para consumir y dejó de pagar hasta que lo buscaron y advirtieron, pero no hizo caso, se vio poderoso e intocable, pero dieron con él y lo subieron a una camioneta y ya no lo volvieron a ver.
Y Jean Albert Hootsen, del Comité de Protección a Periodistas, leyó un fragmento de desaparecidos de “Levantados”, la muerte sin cadáver, sin sepelio ni panteón. Y la pregunta ¿A dónde los rezos, el novenario, las flores y el llanto? ¿En qué lugar se encenderán las velas y se llevará la música que tanto le gustaba? Muerte extendida y multiplicada, muerte que salpica y alcanza a muchos.
Alex López, de Recuperarte, dio su testimonio de cuando Javier publicó en La Jornada la labor que realizaban y luego vinieron las entrevistas por otros medios nacionales.
En la jornada Cultural, estuvo como moderadora, la escritora Dina Grijalva, donde se cerró un tramo del Paseo del Ángel para instalar un bazar y ventas en apoyo a los grupos y colectivos de búsqueda de sus desaparecidos.
Participaron el niño Santiago Rafael Camargo con la danza del Venado como parte de la tradición yoreme presentación musical de Brenda Romero, monografías animadas de rock and roll, presentación musical de Sol Rosseldy, el espectáculo teatro corporal por Juan Carlos Uribe del grupo Tablas, presentación musical de El Consta y musical del grupo Delta teatro.
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Mientras se realizaba el programa cultural, pintores de Recuperarte realizaban el mural “Aquí nadie olvida, Javier Valdez vive” que iniciaron la tarde del sábado 14 y concluyeron la noche de este domingo 15, al cumplirse cinco años del asesinato del periodista sinaloense coeditor del semanario Ríodoce y corresponsal de La Jornada. Presentes en el evento, la esposa de Javier, Griselda Triana, el director de Ríodoce, Ismael Bojórquez, periodistas y amigos de Javier Valdez.
