Culiacán, Sinaloa. – Luego de que en los últimos días padres de familia, maestros y estudiantes de escuelas del nivel básico han tomado planteles y han bloqueado calles para exigir su rehabilitación después de que fueron vandalizadas durante la pandemia del COVID-19, el gobernador del Estado, Rubén Rocha Moya, reconoció que el problema no es sencillo de resolver porque son más de 6 mil 500 planteles en la entidad, de los cuales más de 500 tienen daños considerables y algunos requieren invertirles hasta 3 millones de pesos.
Dijo que recientemente autorizó un presupuesto por 100 millones de pesos para arreglar principalmente la parte de la infraestructura que es lo elemental y están cachando las denuncias de los servicios que les urgen.
“Que es lo elemental, lo más importante, como no son dos o tres escuelas, son 6 mil 500 escuelas, nosotros lo que estamos haciendo es “cachando” los desperfectos del vandalismo que sufrieron las escuelas, y es muy costoso, escuelas que nos cuestan 2 o 3 millones de pesos para poderlas levantar, es muy complicado y no hay dinero que alcance.”, admitió.
Entrevistado a la arribar al evento de la celebración del Día de las Madres, que organizó el Sindicato de Trabajadores al Servicio del Estado, reveló que hace unos días le informaron que en Sinaloa se ampliará el programa La Escuela es Nuestra, con una aportación de 210 millones de pesos del Gobierno Federal, recursos que se invertirán en este año, porque el reto es acondicionarlas para que sigan las clases presenciales, ya no más en casa.