Culiacán, Sinaloa.- Es alarmante que detrás de los plafones y falsas fachadas, los edificios del centro de Culiacán encierren un verdadero peligro al ocultar deterioros y debilidades que pueden dar paso a sucesos lamentables como el de la caída de un techo de una zapatería donde murió una empleada y cuatro más resultaron heridos.
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Para el arquitecto, maestro de la Facultad de Arquitectura de la UAS, Sergio Valenzuela Escalante, los daños a la estructura en este caso, se encontraban disimuladas con relucientes acabados, pero es conveniente analizar la posibilidad de debilitamiento de la estructura al demoler un local vecino, que fue parte del mismo edificio.
“Que se disfraza detrás, de todo ese falso plafón, por ejemplo, todos los edificios comerciales tienen falso plafón, no vemos lo que hay adentro en la estructura, lo mismo la fachada y se cubre y se oculta lo que puede estar pasando en la estructura, ese es el problema”, indicó.
Señaló que, ante el anuncio del alcalde, Jesús Estrada de que se revisarán todos los edificios, Valenzuela Escalante señaló que Protección Civil debe apoyarse en la voz de profesionales arquitectos o ingenieros civiles, quienes tienen el conocimiento necesario para determinar las condiciones físicas y de seguridad de un inmueble.
El arquitecto, manifestó su preocupación de que exista la posibilidad de que cuando se subdividió el inmueble que albergaba la zapatería siniestrada, no se le hubieran agregado apoyos estructurales, como castillos, lo que se tendría que corroborar revisando los muros lo cual tendría que hacer un experto.
Advirtió que un edificio histórico anterior al año 1900 puede estar en mejores condiciones estructurales que uno construido en los años 40 o 60 del siglo 20, ya que todo depende del tipo de manteniendo que se le haya dado, así como de los materiales utilizados en su construcción.
