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Guamúchil, Sin.- Con la entrega de obras de pavimentación y un recuento de las inversiones realizadas durante su mandato en el municipio de Salvador Alvarado, el gobernador Quirino Ordaz Coppel se despidió este miércoles de los habitantes de esta localidad.
Las calles que se pavimentaron son un circuito entre la Macario Gaxiola y Adolfo López Mateos, además de un tramo de la Nicolás Bravo, para un total de 700 metros lineales, que incluyeron banquetas, alumbrado y reposición del sistema de agua potable y drenaje para una inversión de 14 millones de pesos.
Ordaz Coppel recordó que, durante su administración, se pavimentaron aquí 45 calles, se reencarpetaron calles de asfalto, se repararon algunos colectores del drenaje, se invirtió en el estadio de beisbol y se cambió el alumbrado público del bulevar, Antonio Rosales y así se despidió.
“Agradecido y contento de estar aquí, de estar con ustedes, yo les reconozco mucho y me despido realmente entregando estas obras, dije que iba a arrancar así, trabajando y así me voy también, con obra y en la calle”.
Por su parte, la presidenta municipal, Pier Angely Camacho Montoya expresó su agradecimiento por tener el apoyo del gobernador en todo momento y de poder concretar obras tan anheladas como la pavimentación de estas calles.
“Me decían que tenían casi 40 años añorando esta pavimentación, que es ruta de camión y que hoy es una realidad y, sobre todo, que no nos cuesta ni un peso, todo viene del estado, todo el apoyo”.
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Con el corte de listón se declaró la inauguración de las obras y Quirino Ordaz Coppel cerró su última visita al municipio, antes de entregar el cargo el próximo domingo.
