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Culiacán, Sinaloa. – El cambio de horario que se aplica en México durante el verano y el inverno no representa ningún ahorro en el pago del servicio de energía eléctrica como lo presume el gobierno federal, solo provocan daños psicológicos a las personas que cambian sus hábitos de vida al adelantar y retrasar el reloj como ocurrirá este domingo, consideraron los representantes de Canaco y Canirac, delegación Culiacán.
Diego Castro Blanco, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo, delegación Culiacán, (Canaco), cuestionó que la luz del sol que se gana por las mañanas se pierde por la tarde, porque los comercios abren después de las 8:00 de la mañana y algunos cierran hasta las 8:00 de la noche, y durante el invierno se oscurece a partir de las 5:30 de la tarde, y esto se aplica igual para el gasto en los hogares.
“No vemos realmente un ahorro que vale la pena, y sí trastoca un poquito los hábitos, la parte de la adaptación que tenemos por naturaleza las personas, a veces el reloj biológico que causa ciertos desajustes”, se quejó.
El líder de los comerciantes formales en la capital sinaloenses insistió que el ahorro en pesos y centavos es simbólico, y el propósito de este horario es más por las transacciones económicas con el comercio que se tiene con Estados Unidos y entidades federativas al interior del país.
En entrevista por separado, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Miguel Taniyama Ceballos, coincidió con su homólogo al afirmar que no existe ningún beneficio económico para el gremio.
“La verdad que a través de los años que hemos vivido este horario de verano, nosotros en lo particular no vemos un descuento o un ahorro sustancioso o real que podamos nosotros observarlo en el tema del recibo de la luz”, cuestionó.
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Recalcó que ellos siguen recibiendo los mismos costos en la facturación mensual, ya que los restaurantes abren muy temprano y cierran entrada la madrugada, además sus sistemas de refrigeración operan las 24 horas para conservar sus alimentos.
Finalmente, admitió que durante el invierno se les reduce hasta un 50 por ciento el costo de la energía eléctrica porque encienden menos horas los aires acondicionados y el calor se reduce de los 43 grados a los 28.
