Mazatlán, Sin.- Bajo la sombra de un árbol de mango y a los cuatro vientos con su piso de tierra suelta, es como reciben sus clases 45 alumnos de la escuela secundaria “Nueva Creación”, ubicada en el fraccionamiento Santa Teresa, en el puerto de Mazatlán, ante la falta de un aula de concreto.
Estudiantes y maestros que, tras volver a las clases presenciales desde febrero pasado, han vivido en los últimos meses una triste realidad, y que, ante las altas temperaturas comienzan a sufrirla, donde por fortuna las lluvias no han llegado, pero sí están al acecho de mosquitos y hasta de abejas, que son una de las fieles compañías para los alumnos, manifestó Carmen Yolanda, madre de familia.
Agregó que la ilusión de ver a su hija en ser alguien en la vida el día de mañana, hoy la obliga a llevarle a este plantel a recibir sus clases en estas condiciones, y más porque ya está en tercer año, próxima a concluir su secundaria, por eso apela a la atención del gobernador Rubén Rocha Moya, así como a la misma titular de la Secretaría de Educación Pública y Cultura (SEPyC), Graciela Domínguez para que pongan atención y pronto brinden una solución.
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La madre de familia reconoce que aún cuando su hija ya va de salida, vienen más alumnos en el próximo ciclo escolar que merecen recibir sus clases en mejores condiciones y espacios dignos.Cada día su hija, apuntó, suele comentarle que sufre de picaduras de moscos y hasta que a más de uno le han caído mangos sufriendo el golpe.
Por su parte, Johana Jiménez, maestra de la materia de Inglés, admite que los 50 minutos que dura la impartición de clases, se convierte en una labor complicada frente a todas las distracciones que acompañan a los adolescentes.
Consideró injusto que los alumnos hoy se enfrenten esta situación, luego de venir de cierta manera de una comodidad que da un aula o haber estado encerrados en casa a consecuencia de la pandemia, y ahora sufrir del calor, estar expuestos al polvo de manera directa y hasta resultar golpeados con los mangos que caen sobre ellos al estar bajo la sombra de un árbol para recibir clases.
Señalan que el problema se agudizará en el próximo ciclo escolar, ya que la matrícula de la secundaria “Nueva Creación” del fraccionamiento Santa Teresa, será de más alumnos y se ocupará de cuando menos tres aulas para que se puedan impartir las clases, sino tendrán que estar bajo los demás árboles.