Culiacán, Sinaloa.- Cada vez es menor la edad de pacientes que llegan al Centro de Integración Juvenil en Culiacán por problemas de consumo de sustancias, y es que, hay casos de adolescentes de 13 años que presentan comportamientos agresivos con su familia, una vez que detectan la adicción.
El director del Centro de Integración Juvenil (CIJ), Manuel Velázquez, indicó que son el tabaco, la mariguana y la metanfetamina, las sustancias con las que se tiene una etapa experimentadora.
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Algunos, del tabaco pasan a la metanfetamina; otros van directo al consumo de mariguana y unos más, combinan estas dos últimas sustancias que provocan diferentes reacciones en el comportamiento de las personas.
Manuel Velázquez comentó que en las familias cuando se trata de adolescentes, los padres entienden que su comportamiento agresivo proviene a que atraviesa por su proceso de juventud y es hasta cierto grado “normal” que sea violento.
“Hay una cierta tolerancia mal entendida en los padres, que dice, no, es que es adolescente, y al ser adolescente es normal que sean violentos, no, no tendría que ser normal, pero se ha normalizado, pero cuando ya se ve acompañado con una sustancia, esto es más grave y por esto es que a más temprana edad acuden”, precisó.
El director del Centro de Integración Juvenil detalló que cuando los padres intentan eliminar el consumo de su hijo de manera drástica, llega a transformarse en un entorno más violento, y es ahí cuando acuden con especialistas para un tratamiento específico.
En etapa experimental, se tiene detectado que el primer consumo se da en menores de entre 10 y 12 años, expuso.
