Los Mochis, Sin.- Una acusación más pesa en contra de funcionarios municipales de Ahome de entrometerse en el proceso para la elección de Síndicos Municipales y esta la hizo el presidente de la Comisión de Gobernación del cabildo ahomense, Héctor Vicente López Fuentes en contra del director de Participación Ciudadana, Etanislao del Moral y de un funcionario de alto rango que solo mencionó como ‘el profesor’.
El edil del PT, dijo que las despensas que cada mes reciben los regidores, fueron destinadas a repartirlas en las sindicaturas en apoyo a ciertos candidatos por parte de Participación Ciudadana, por lo que al cuestionar al titular de esta dependencia le dijo que solo estaba recibiendo ordenes de un ‘profesor’ y tenía que acatar por miedo a que lo corrieran.
“Estamos a 22 (de marzo) y no recibo las despensas que me dan a más tardar el día 5 (de cada mes) para ayudar a la gente porque todo este apoyo se fue a las sindicaturas, yo hablo con el licenciado Etanislao del Moral (director de Participación Ciudadana) y me dice: qué voy a hacer hermano si me obligan a hacer esto; pues él me dice que de un profesor, todo mundo sabe, dice que tiene miedo que lo corran”, expresó.
López Fuentes dijo que tanto él como sus compañeros regidores tienen bastante evidencia de la intromisión de funcionarios municipales de primer nivel en el proceso, pero las darán a conocer una vez que el alcalde Guillermo Chapman regrese a sus funciones para que este tome cartas en el asunto.
“Tenemos muchas pruebas, muchas evidencias, pero la queremos soltar hasta que esté el señor presiente, si él se niega de plano, es asunto de él, lo que no me gusta a mí que se inmiscuyan personas de aquí del Ayuntamiento, nunca voy a estar de acuerdo, deben de dejar que la gente elija”, comentó.
El representante del Partido del Trabajo llamó a la ciudadanía a tomar todo lo que les lleven a regalar ya sea por particulares o por el mismo Ayuntamiento de Ahome, pero a la hora de elegir a los representantes de sus sindicaturas lo hagan con libertad y no se dejen convencer por quienes se han dedicado toda su vida a hacer marrullerías.
