Dautillos, Navolato, Sinaloa.- Ecuánimes y serenos, los padres de Miguel Ángel, el capitán de la panga que desde el jueves salió a pescar tiburón junto con tres muchachos más, salieron rumbo a Topolobampo a encabezar la búsqueda de los dos pescadores que todavía falta por encontrar.
Luego de que fueron encontrados flotando cerca de Navachiste los cuerpos de Cinué y de José Francisco, este jueves los padres de Miguel Ángel, Daniel García y su esposa Isabel, salieron con poco más de 10 personas salieron desde Dautillos, Navolato, hasta Topolobampo.
Lo hicieron cargados con bidones y gasolina para reiniciar la búsqueda desde Guasave hacia el norte, con la esperanza de que Miguel Ángel y David, quienes aún se encuentran desaparecidos, se encuentren en la misma área donde se ubicaron los cuerpos de José y de Cinué. Que más quisieran que sea con vida.
“Ya viendo, empezando a ver los resultados que se encontraron estos dos muchachos, ahora la idea es ir a peinar la zona, lo que viene siendo Guasave”, comentaron.
Y es que por economía es mejor gastar en cinco lanchas saliendo de algún campo pesquero de Ahome o de Guasave que una sola panga de búsqueda desde Dautillos hacia el norte, que es donde se espera localizar a los otros dos pescadores que faltan.
De las causas que podrían haber hecho que la panga en la que iban se hundiera hay dos hipótesis.
“Pues para nosotros… habíamos sacado conclusiones: primero, que como es la línea por donde pasan los barcos cargueros, les haya pegado y los haya hundido, pero, a como estamos viendo las cosas, pensamos que se hayan hundido con todo y todo: o que hayan sobrecargado la panga y se hayan ido a pique con todo”, manifestó el señor Daniel.
La densa neblina que todavía este miércoles se observaba en la zona es mayor en el mar, la cual se vuelve sumamente peligrosa a donde se va a la captura de tiburón, reconoció. Esto ha impedido también que salir a las búsquedas desde temprano se haya hecho imposible, ya que se quitan hasta el mediodía una vez que empieza a calentar el sol.
Este jueves, Daniel, quien no ha parado de salir a buscar a su hijo, soporta su sensación de pérdida anticipada en Isabel, su esposa quien ha sacado el temple para ir hasta Topolobampo y reconocer los cuerpos de los dos que el miércoles fueron encontrados ahogados. José y Cinué llegaron este jueves al mediodía, fueron velados escasas cinco horas, llevados a la iglesia y luego al panteón del lugar.
Hoy siguen buscando a Miguel Ángel, el mayor, y al pequeño David, de apenas 17 años, que tras ir en busca de tiburón, no han podido salir del mar.
