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México.- Para muchos adultos, beber una copa de vino o una cerveza junto a los alimentos diarios es una práctica común, y tienen la creencia de que con ello pueden convertirse en personas más sanas, sin embargo, un nuevo estudio podría venir a cambiar lo que hasta ahora se pensaba.
En la investigación publicada en la revista Nature Communications, participaron científicos de las universidades de Pensilvania, Winsconsin y Zurich, quienes encontraron que el consumo constante de las bebidas alcohólicas puede provocar daños en el cerebro que van desde su disminución hasta el envejecimiento.
En los resultados, los expertos aseguran que, aunque sea en cantidades pequeñas, tomar alcohol puede acelerar el efecto del envejecimiento por al menos dos años. Entre los participantes en el estudio, se detectó que quienes tomaron una unidad al día, o lo equivalente a un vaso de vino, mostraron medio año, mientras que subía el período de tiempo conforme aumentaba la ingesta.
Así, quienes toman dos unidades, que podría definirse como una cerveza completa, mostraron un efecto de envejecimiento equivalente a dos años.
El daño en la masa cerebral aumentó en las personas que consumían tres unidades diarias de alcohol. En ese caso, el envejecimiento fue de 3.5 años. Por último, el estudio indica que cuatro unidades suponen un deterioro de diez años.
Los investigadores concluyeron que ninguna cantidad de bebidas alcohólicas es segura para el cuerpo humano, y menos para el cerebro.
